Una marea celeste, integrada por cerca de mil personas, 'asaltó' ayer el castillo de Mula en una jornada en la que reivindicaron que la fortaleza sea restaurada, visitable y patrimonio de los muleños.

Los organizadores de la marcha calificaron de «éxito rotundo» la jornada, que comenzó bien temprano en el núcleo urbano de la localidad.

Desde allí, y enfundados en las camisetas celestes en las que se podía leer el lema 'Mula por su castillo' (nombre que también recibe la plataforma creada al efecto desde el pasado mes de julio) los participantes se dirigieron hacia la fortaleza. El colectivo pretende conseguir que el edificio vuelva a manos del Ayuntamiento para que éste pueda iniciar los trámites para llevar a cabo su conservación.

Ya en el momento de su constitución, la plataforma denunció que desde que la fortaleza fuera otorgada por el Tribunal Supremo a la familia Beltrán de Lis y Pídal, hace ya más de 15 años, los herederos no han ejecutado ninguna mejora en el inmueble que sufre un continuo deterioro que ha obligado a las autoridades locales a vallar los accesos.

El único color es el celeste

No hubo lugar ayer para los colores políticos. El celeste, elegido por la Plataforma Mula por su castillo, fue el protagonista absoluto de la jornada. Un color que se enfundaron los participantes en la marcha, entre los que estaban incluidos diversos políticos, como la consejera de Cultura, Noelia Arroyo; el candidato al Congreso por Ciudadanos, Miguel Garaulet; así como otros diputados regionales de todos los grupos políticos de la Región.

Por su parte, la responsable de Cultura y Portavocía del Gobierno regional mostró todo su apoyo al colectivo para que se cumplan sus peticiones y aseguró que «se van a seguir dando todos los pasos necesarios por la vía legal» para que el Castillo de Mula no acabe completamente deteriorado: «Para bien o para mal, esto no se va a quedar estancado», aseguró ayer Arroyo durante la marcha.

Pese al carácter reivindicativo de la convocatoria, la marea celeste se llenó de familias completas, de grupos de amigos y de visitantes amantes del patrimonio que hicieron que el buen ambiente reinara a lo largo del día.

El Castillo de Mula, o Castillo de los Vélez, es una austera construcción militar del siglo XVI y su construcción fue consecuencia de un importante cambio histórico en la administración municipal.