M. HUERTAS / D. GÓMEZ

El alcalde de Alhama de Murcia, Juan Romero, retiró a través de un decreto todas las delegaciones al concejal del Partido Popular Jesús Basauri, que hasta ahora había ocupado las concejalías de Cultura, Patrimonio, Nuevas Tecnologías y Deportes, así como la portavocía del grupo municipal popular en el Ayuntamiento.

Basauri y Romero estaban enfrentados por el control del PP local, que tiene pendiente celebrar su asamblea para renovar su junta directiva. El edil criticó públicamente a su alcalde, a quien acusó de amenazarle, chantajearle y de actuar "siempre por la espalda y con despotismo".

En un principio sólo estaba previsto que Basauri dejara las competencias de Cultura y Patrimonio, que iban a ser asumidas por Juan Romero cuando deje la alcaldía el próximo 28 de enero, en cumplimento del acuerdo que Partido Popular y PSOE suscribieron en Alhama de Murcia a principios de legislatura. Sin embargo, la tensión vivida en los últimos días y las declaraciones de Jesús Basauri lanzando duras críticas contra Romero han hecho reflexionar al alcalde, quien ha considerado que la mejor opción es que Jesús Basauri deje de tener responsabilidades de gobierno. Sus delegaciones serán gestionadas ahora por Juan Romero (Cultura y Patrimonio), José López (Nuevas Tecnologías) y Alfonso Cerón (Deportes).

Sin embargo, Basauri mantiene por el momento la portavocía del PP, debido a que esta competencia no se la puede retirar por decreto y es necesaria la conformidad del edil. Basauri denunció hace unos días que Romero intentó hacerle firmar un documento que contenía su renuncia a la portavocía del PP, a lo que el concejal degradado se negó "porque no eran las formas adecuadas". Esta redacción ha podido saber que en los próximos días el PP regional forzará a Basauri a dejar la portavocía. Éste, por tanto, tiene ahora dos opciones: dimitir y dejar paso al siguiente en la candidatura del PP o quedarse como concejal sin responsabilidades de gobierno.

Este pacto firmado entre PP y PSOE en Alhama de Murcia establecía que lo dos partidos (que suman once concejales, seis populares y cinco socialistas) se repartirían las concejalías y gobernarían junto durante toda la legislatura. La alcaldía la ocuparía Juan Romero hasta enero de 2010, cuando debe ceder el testigo al socialista José Espadas, actual responsable municipal de Urbanismo.