A juicio de los servicios técnicos de Asaja-Murcia, "para las empresas que apuestan por el desarrollo de los biocombustibles y para los propios agricultores que deciden incorporarse a la producción de estos cultivos, el desarrollo de esta forma de energía necesita de un impulso decidido por parte de todas las administraciones que deben arbitrar medidas efectivas para que esta iniciativa europea tenga el éxito esperado".

Al respecto, Gálvez Caravaca explicó que "desde que en 2004 la UE pusiera en marcha el denominado crédito carbono, que implica una ayuda para la producción de cultivos energéticos de 45 euros por hectárea para 1,5 millones de hectáreas comunitarias, el total de superficie acogida a este programa en España ha sido de 6.800 hectáreas en 2004 y 27.321 en 2005".

En esta línea, el secretario general de esta organización agraria consideró que "estas cifras quedan muy lejos de las posibilidades reales del programa si se tiene en cuenta que su dotación económica asciende a 67,5 millones de euros anuales y a nuestro país sólo llegaron, en 2004 y 2005, 0,3 y 1,2 millones de euros respectivamente".