España sigue siendo un excelente mercado para la marca coreana, que consigue cerrar este año con una cuota del 4,7 % gracias a sus 51.000 unidades vendidas, un 18 % más que en el año anterior. Sin duda los actores principales que han impulsado este crecimiento han sido los nuevos Niro y Sportage, presentados durante este 2016, y al que se les ha unido la nueva generación del Optima. Pero la cosa no queda aquí, porque para el próximo año, Kia tiene prevista una ambiciosa ofensiva de producto con la llegada de los nuevos Rio, Picanto y Niro enchufable, además de dos modelos para nuevos segmentos.
De momento analizamos el nuevo Optima, que llegó al mercado a principios de este año en su formato sedán y que se completa ahora con la versión familiar Sportswagon, la línea GT y la variante híbrida enchufable para la berlina. El año próximo aparecerá esta misma tecnología de propulsión también para el familiar.
Dispuesto a lidiar en una categoría (segmento ´D´) que se recupera algo del bajón del mercado de hace pocos años, el Kia Optima tiene contrincantes muy cualificados, sobre todo los europeos, que se disputan parte de un pastel que supone un 4,7 % de cuota del mercado total (más de 54.000 vehículos matriculados este año). Los argumentos que esgrime son un diseño atractivo, tecnología a la última y placer de conducción.
La primera cuestión la pasa con nota. Su carrocería de 4,85 metros aparenta dinamismo y vanguardia. Dentro tiene bastante calidad, los ajustes no defraudan y el ambiente es de clase superior. Destaca también el enorme espacio para los ocupantes traseros, donde este Kia echa el resto convirtiéndose en una de las referencias de su clase. El maletero cuenta con 510 litros de capacidad, 552 litros en la versión familiar.
La gama principal del Optima se articula a través de un motor diésel de 141 CV, procedentes de un bloque de 1,7 litros de cubicaje y cuatro cilindros. Suave de funcionamiento, se puede asociar a un cambio manual de seis relaciones o a un automático de siete, de doble embrague y desarrollado por la propia marca. El consumo oscila entre los 4,2 y los 4,6 litros por cada 100 km en función de la carrocería y si monta la caja automática o manual.
En cuanto al Optima PHEV, tiene un sistema de propulsión mixto gasolina y eléctrico. El primero consiste en un bloque de dos litros y 156 CV, que se une a otro eléctrico dentro de la propia caja de cambios, que es automática y de seis marchas. Rinde una potencia conjunta de 205 CV y su gasto medio homologado es de sólo 1,6 litros por cada 100 km (este tipo de coches, en su ciclo de homologación, pueden circular también en modo eléctrico, de ahí esa cifra tan baja). El Optima PHEV aguanta hasta 54 km sin gastar gasolina, gracias a su batería, siempre por debajo de 120 km/h, unas prestaciones de funcionamiento eléctrico que no están nada mal.
La versión más prestacional GT monta un propulsor de gasolina de dos litros y 245 CV, y además se diferencia del resto de sus hermanos por sus llantas de 18 pulgadas y los paragolpes específicos en el exterior y por sus asientos más deportivos, la instrumentación adaptada y varios detalles decorativos en el interior. El potente motor se sirve en las dos carrocerías y se une a un cambio automático de seis relaciones de convertidor de par. El consumo homologado es, en ambas carrocerías, de 8,2 litros por cada 100 km.
Los acabados previstos para la gama son Concept, Drive, GT Line y GT. El último de ellos se reserva únicamente para el más deportivo de 245 CV. Los demás se dejan para el propulsor diésel de 141 CV, con un ambiente de estilo más deportivo GT Line, que está basado en el tope de gama GT.
Desde el nivel de acceso Concept, el Optima monta llantas de 16 pulgadas, freno de estacionamiento por botón, luces diurnas con Led, navegación en pantalla de 7 pulgadas y cámara de visión trasera, climatizador doble, programador de velocidad o sensores de lluvia y luces, entre otros. El siguiente escalón Drive añade llantas de 17 pulgadas, avisador de salida de carril, faros de xenón, cristales tintados, asiento del conductor con ajustes eléctricos, aparcamiento asistido y acceso y arranque sin llave. Por último, el acabado GT Line suma llantas de 18 pulgadas, faros del Led adaptativos, techo solar, piel en los asientos, navegación en pantalla de ocho pulgadas, asiento del pasajero con ajustes eléctricos y portón trasero de apertura por proximidad. Los dos últimos acabados pueden incorporar la caja automática de siete marchas, que tiene disponible un paquete con la frenada de emergencia en ciudad, el control de velocidad adaptativo y la alerta de tráfico trasero.
Los precios del Kia Optima diésel de 141 CV arrancan en los 22.145 euros; el Sportswagon vale desde 23.645 euros, el GT de 245 CV vale 35.238 euros y el híbrido sedán cuesta 38.215 euros.
