PRIMERA PRESIDENCIA, enero-junio de 1989. Felipe González era el presidente del Gobierno de España.

España accede a su primera presidencia de la UE (entonces Comunidad Europea) por riguroso orden alfabético sólo tres años después de su adhesión y con una Comisión Europea recién estrenada.

Durante esta presidencia, se lograron avances en las directivas sobre mercado interior y en el objetivo de la Unión Económica y Monetaria (UEM).

Asimismo, se puso gran énfasis en la integración económica, que se concretó en la presentación formal de la Carta Social europea, aunque no se logró una postura común debido a las objeciones del Reino Unido y Dinamarca. No obstante, el anteproyecto fue ratificado por once países.

SEGUNDA PRESIDENCIA julio-diciembre 1995. Felipe González seguía al frente del Gobierno español.

Esta presidencia puso especial atención en las relaciones con EEUU y elaboró en colaboración con Washington y la Comisión Europea, una Nueva Agenda Transatlántica y un Plan de Acción Conjunta.

La firma de sendos documentos por los presidentes Bill Clinton, Felipe González y el presidente de la Comisión Europea, Jacques Santer, tuvo lugar en Madrid el 3 de diciembre de 1995.

Asimismo, se celebró la primera Conferencia Euromediterránea en Barcelona y se rubricaron acuerdos de asociación con Israel, Túnez y Marruecos, además de una unión aduanera con Turquía.

También se firmó un documento provisional con Rusia, se aprobó el Acuerdo Interregional UE-Mercosur, se iniciaron los contactos con Cuba para un acuerdo de cooperación y se firmaron acuerdos de cooperación con Vietnam y Nepal.

TERCERA PRESIDENCIA -enero-junio 2002. José María Aznar presidía el Gobierno español.

Coincidió con la puesta en circulación del euro en doce países y fue el inicio de una fase crucial de negociaciones para la ampliación al Este de Europa y la consiguiente reforma de las instituciones comunitarias.

Entre las prioridades destacaron: La lucha contra el terrorismo en un espacio de libertad, seguridad y justicia; seguimiento de la puesta en circulación del euro y mantenimiento del compromiso con el Pacto de Estabilidad, además del impulso al proceso de reformas económicas y liberalizaciones.

Se pusieron las bases de una política común frente a la inmigración ilegal y se confirmó la fecha de 2004 para la ampliación al Este de Europa.