Influencias de braque y de picasso. En el cuadro puede llegar a intuirse un laberinto de colores, un techo de ajedrez y una mujer, que recuerda a las que gritan en el Guernica, pedir ayuda y disgregarse al tiempo, en una suerte de lilas, grises, blancos y negros.

Dicen los expertos que «las obras de Salva Piñero están cargadas de corrientes cubistas, llenas de figuras geométricas que expresan lo abstracto que puede llegar a ser el paso del tiempo y la existencia del hombre». Así lo recogen desde la Comunidad. Y es que «en sus cuadros pueden contemplarse imágenes y referencias inspiradas en Georges Braque o Pablo Picasso, aunque este trabajo se aleja de la corrección y las ambigüedades de esos pintores».

Salva Piñero (Puerto Lumbreras, 1985) «es un artista autodidacta y fiel a la filosofía del arte por el arte, de la importancia de la belleza y la forma por encima de cualquier referencia. Su incursión en el mundo de la pintura viene marcada por sus inquietudes personales, tanto en las artes plásticas como en otras disciplinas literarias como la poesía y el relato corto. Ha realizado exposiciones individuales y colectivas», explicaron desde el Ejecutivo.

Ahora, el artista se lleva de gira a sus Locomotoras. La muestra está compuesta por una veintena de obras, en su mayoría óleos, pero también acrílicos y pinturas de técnica mixta. La exposición podrá visitarse a partir de mañana y hasta 20 de agosto en la sala Torre del Homenaje de Aledo.