El pasado mes de mayo, cuando tuvimos la última entrevista, reclamaba más implicación de instituciones y empresarios en el proyecto. ¿Lo han conseguido?

Lo primero, decirte que la persona más ambiciosa, que cree en el proyecto e incita cada año a hacerlo mejor es el presidente. Desde que José Luis Mendoza está en el club se han conseguido los mejores resultados deportivos de la historia, se han batido todos los récords, y él ha dado un paso adelante por el baloncesto, soportando muchas veces el peso y la falta de ayuda. Quizás esta temporada sí estamos notando el apoyo por parte de algunas instituciones. La consejera Adela Martínez-Cachá ha estado ayudándonos desde la Comunidad y el delegado del Gobierno, Paco Bernabé, también. Sí que nos gustaría, porque el proyecto lo merece y tenemos un equipo con identidad muy clara, que tuviéramos a todo el mundo concienciado de que es el proyecto de la Región y que es de todos.

¿Y a nivel empresarial?

Se han conseguido nuevos patrocinadores. Muchas veces el concepto de que el club es de la UCAM hace que mucha gente no se dé cuenta de que hacen falta ayudas, porque no estamos a nivel de presupuesto con los equipos que estamos compitiendo, como Tenerife, Andorra o Fuenlabrada. Nosotros estamos a la cola, pero no estamos igual a nivel de ambición que los de la cola. El equipo no es solo de la UCAM, necesita apoyos, socios, empresarios que vayan de la mano en este momento que creo que es interesante, que por segunda vez se juega competición europea y eso es bueno para toda Murcia y la Comunidad.

Sin embargo, hay un punto de desencuentro con el Ayuntamiento.

Lo más importante es que con el concejal de Deportes está todo hablado. Es cierto que en un momento puntual él no entendió nuestra clasificación para la Champions, pero estamos deseando que el alcalde y el concejal, que son personas de baloncesto, estén con el equipo, lo sientan como suyo y lo apoyen. Estamos encantados de estar en la ciudad de Murcia y nos encantaría sentir el apoyo de la institución más importante. En ocasiones han existido discrepancias, pero no es el momento de remover cosas del pasado. Lo que nos gustaría es sentir el apoyo, la ayuda y ser reconocidos como en otros equipos de la ACB. Nadie ha pedido nada que no se justifique con lo que estamos jugando y donde estamos clasificados. Nos gustaría tener las ayudas de otros clubes de la ACB y dejar a un lado temas personales.

En ocasiones el presidente ha puesto en duda la continuidad del club de baloncesto. ¿Está en peligro en estos momentos?

Muchas veces el presidente se ha sentido solo y que lleva el peso por completo del club, y necesitamos que él se sienta arropado. La gente tiene que darle el mérito que tiene a Mendoza por tener el baloncesto donde lo tiene. La afición y muchos patrocinadores lo tienen claro y lo que hace falta es que más gente se sume al carro porque el mérito es suyo.

Pero no ha respondido a la pregunta. ¿Está en peligro el futuro del club?

A mí el presidente me traslada en cada partido la ilusión que tiene por el equipo. Yo no te puedo adelantar lo que pueda pensar o no, pero lo que siento es que estoy arropado por él, al igual que los jugadores, y no noto que esté alejado del equipo, sino todo lo contrario.

Lleva nueve años aquí. ¿Usted cree en los ciclos?

Creo en los ciclos y pienso que este equipo necesita crecer, creo que no podemos dar marcha atrás. No tenemos más remedio que avanzar y lanzarnos a tumba abierta como los ciclistas para seguir consiguiendo objetivos y buscar equipos que nos identifiquen.

Ahora nadie entendería un paso atrás.

La realidad es que arriesgamos en cada proyecto, pero el presidente y yo somos valientes cuando hacemos los equipos. Apostamos porque el deporte es para valientes y la historia no recuerda ni habla de los cobardes. Lo que no vamos a hacer es ir buscando excusas en estos momentos.

¿En realidad pensaban en verano que el equipo podría llegar tan alto en la primera vuelta?

Las plantillas siempre se hacen creyendo en conseguir grandes resultados. Sabíamos que el equipo tenía una identidad clara de juego, que no es el más vistoso pero sí el más efectivo para nosotros, que nos iba a llevar a competir en cada partido, y esa es la parte de la que más orgulloso estoy, que el equipo se deja el alma y saber siempre que se ha vaciado. No tenemos el talento de otros equipos, pero ellos dan el cien por cien. Es la primera temporada que entramos en un vestuario después de perder y estamos orgullosos, y créeme que otras veces las entradas en el vestuario han sido duras y para otras cosas.

Se ha extendido el calificativo de 'bad boys de la huerta' ¿Le gusta?

Los 'bad boys' fueron un equipo de la NBA, con una identidad clara. A mí me gustaría que fuéramos el 'showtime' de la huerta, que tuviéramos 30 millones para hacer la próxima plantilla y que hiciéramos un baloncesto espectacular. En ninguno de los partidos hemos visto una acción de bad boys, ninguna jugada de este equipo ha provocado una lesión en un jugador rival. Y yo sí he visto en Zaragoza a Sadiel Rojas entrar en parada cardiorespiratoria y tener que entrar el médico en la pista para meterle un tubo en la boca porque si no moría en la pista. Una cosa es jugar al límite, dejarse el alma y ser gente honrada, y otra son esas.

¿Le molestó que un entrenador de ACB se metiera con Sadiel Rojas en su cuenta de Twitter?

Yo creo que Pedro Martínez (Baskonia) no lo hizo con mala fe. El problema es que si nos ponemos a comentar cada jugada y cada posible agresión, creo que hay jugadores mucho más duros y muchos que van a hacer daño y con mala leche en la liga. Me preocupa la repercusión que tuvo y que en Santiago, en dos jugadas en las que no tocó al contrario, le pitaran falta a Rojas. Como dijo Ibon Navarro, quizás no puede jugar en esta liga, pero lo único que hace es jugar al límite y de forma honrada, con el pecho por delante. Rojas representa el espíritu de lucha y ganas de este equipo, pero no es sucio. Se han hecho muchas acciones contra él que se saben y, otras muchas que no, con las que se podría escribir un libro.

¿Echa en falta más regularidad de Brad Oleson?

En ataque estoy de acuerdo, pero en defensa no, porque siempre le ha tocado defender al mejor del equipo contrario. Siempre ha dado la cara y en muchos partidos no ha estado a su nivel de acierto en el tiro por el esfuerzo que hace en defensa. Muchos de los problemas que tenemos en el porcentaje de tiro son consecuencia de nuestra defensa, porque si no jugáramos al nivel que lo hacemos, arriba estaríamos más frescos y meteríamos más.

¿Faverani ha sido el peor negocio de la temporada?

La realidad es que nos gustaría que Faverani hubiera estado. Cuando hicimos la plantilla estaban Tumba y Delía por delante de él, y visto después del tiempo que llevamos de temporada, y lo que ha jugado, no ha sido un buen negocio. Pero si lo hubiéramos fichado como un jugador importante como la temporada pasada, sí que hubiera sido un mayor error. Era una apuesta y ha salido mal.

¿Por qué sí han dejado ahora salir a Julen Olaizola?

Porque la entrada de Antelo y la posible de Faverani hace que la cantidad de jugadores interiores sea importante. Él pidió salir y el entrenador no quería que se fuera porque aporta mucho en los entrenamientos y en el vestuario, pero creíamos que se merecía salir sabiendo que no tenía sitio.

¿Por qué ha sido tan difícil acertar con los cupos?

Porque no hay. Los cupos buenos los tienen copados los grandes y el Valencia. Las siguientes generaciones no han venido y hay que inventárselos. No existen cupos para el UCAM Murcia ni para el resto de equipos de la liga.

¿Por qué se dejaron libres las dos fichas extracomunitarias?

Nos gustaba la idea de dejarlas por si surgía algún problema durante la temporada. Hay un momento en el que se duda en fichar a Matt Thomas, que acaba en el Obradoiro, o decidirnos por Oleson porque era cupo por el tema de la Champions y era una apuesta. Matt Thomas nos gustaba mucho, pero consideramos que era mejor hacer este equipo. Tener las plazas libres, o no, es relativo.

¿Cuántas veces le han echado en cara el no renovar a Radovic?

Radovic tenía una idea en la cabeza a nivel de futuro y nosotros tenemos unas condiciones económicas. La idea era que con Antelo en plenitud de condiciones, fichar a otro jugador diferente como Lukovic, al que el entrenador conocía. Si la lesión de Antelo hubiera sido antes, habríamos hecho un esfuerzo para quedarnos a Radovic. Entendíamos que necesitábamos a un jugador con más mano y que apretara más.

¿Qué pasa con Lukovic?

Ha demostrado en muchos partido la calidad que tiene, pero no está rindiendo al nivel que nos gustaría. Tiene un hándicap, que es que a nivel físico necesita adaptarse a la liga y también es complicado valorarle tras la lesión de Antelo. Tenemos que tener paciencia con él porque quizá en otras circunstancias nos daríamos cuenta de que es un buen jugador, pero ojalá que saque su mejor versión aquí con el tiempo.

¿Podría ser jugando de alero?

Es ala-pívot, pero es verdad que Lukovic y Soko, con un 'cuatro' abierto como es Antelo, pueden jugar como aleros. Nos puede dar otras alternativas, pero el cambio de Lukovic pasa por estar al nivel defensivo de sus compañeros. Tiene que espabilar en cada rebote y ser capaz de tener esa regularidad defensiva.

¿No es momento de empezar a hablar de renovaciones?

Es momento de renovar a jugadores y de hablar del año que viene cuando el presidente lo diga. Estamos en un momento crítico de la temporada, es verdad que hay jugadores que podríamos valorar si ponerles ya ofertas encima de la mesa, pero también debemos ser conscientes de qué vamos a tener el año que viene. Nos gustaría trabajar como otros equipos de la ACB para hacer los equipos a dos o tres años vista, porque al hacerlo todo en verano puedes cometer más errores.

¿Qué nota le pone a Ibon Navarro hasta ahora?

Alta, muy alta. Un nueve, porque el 10 sería la perfección.

¿Es un entrenador con perfil para el futuro?

Sí, es muy bueno para este club. Es muy trabajador, una persona muy normal, que está muy implicada en lo que pasa en este club y también con todos los trabajadores. Detrás de este equipo hay muchas personas trabajando y hay un equipo extraordinario.

Pero su entrenador era Fotis...

A mí me hubiera gustado que Katsikaris siguiera. Estaba integrado, había calado entre la afición y conseguido grandes resultados. Pero él no está en Murcia porque no contamos con el apoyo económico que a él le gustaría. ¿Qué hay de diferente entre Tenerife y Murcia? El apoyo que ellos tienen y que nosotros no tenemos.

¿Tener un equipo tan físico puede pasar ahora factura?

Te voy a ser sincero. Hemos hecho un equipo muy físico para jugar dos competiciones y aún así nos faltan jugadores. Algunos no han podido jugar y otros son cupos y no están. Hemos tenido la fortuna de las ventanas FIBA, que ya nos dieron un respiro en el mes de noviembre cuando perdimos cinco partidos seguidos ,y ahora el equipo estaba físicamente tocado antes de este parón. Ojalá el mercado nos dé la oportunidad y la situación económica para poder reforzarnos, porque nos podría venir bien algún jugador más. Pero la situación económica es la que es.

¿El objetivo es pelear por entrar en el play off de la ACB?

Por presupuesto e historia no tenemos ningún objetivo, pero estamos pensando en el play off y el equipo se lo merece después de acabar octavo y no entrar en la Copa. Nos gustaría llegar también lo más lejos posible en la Champions, pese a que la eliminatoria contra el Tenerife es una lucha de David contra Goliat, porque la ciudad y la Comunidad se merecerían un éxito así y vivir una fiesta en el Palacio de partidos europeos.

Pero eso supone un mayor desgaste todavía.

Estamos de acuerdo. ¿Si no hubiéramos jugado la Champions tendríamos cuatro o cinco victorias más en la ACB? No podemos saberlo. Seguro que tendríamos más jugadores descansados porque no viajamos en un vuelo chárter como los equipos de la Euroliga. Lo hacemos con dos o tres escalas buscando la mayor rentabilidad económica, pero creo que la afición y la gente que apoya este proyecto se merece estar lo más alto posible en Europa. Me gustaría que esto se le diera importancia ahora, no dentro de unos años.

¿Teme que el no haber ido a la Copa pueda pasar factura?

No, lo que temería sería estar luchando por no descender. Ver si somos séptimos o décimos en la clasificación no lo temo, nosotros nos lo tomamos como un reto. Ojalá el año que viene tengamos un presupuesto de 40 millones, pero nuestra realidad es la que es.