Cada entrenador tiene su libreta particular y en el caso del Real Murcia no va a ser diferente, solo que los antecedentes más recientes provocan que José María Salmerón, el técnico del conjunto grana y el hombre que hizo despertar a una plantilla confeccionada a golpe de talonario que no funcionó en el arranque liguero, ha visto cómo las dos últimas veces que ha apostado por tres centrocampistas de corte defensivo para dotar al equipo de mayor seguridad, ha sido imposible conseguir los tres puntos. De las tres veces que el preparador almeriense ha dispuesto este sistema basado en su trivote defensivo solo en una ocasión le ha funcionado y hace bastante tiempo, ya que fue concretamente en la jornada once, justo una semana después de que Salmerón arrancara su etapa como murcianista con una derrota en el campo del San Fernando (3-2).

Contra el filial del Granada, el 29 de octubre, el trivote logró los tres puntos que necesita el Murcia casi por obligación jornada tras jornada, pero las dos últimas veces que Salmerón ha recurrido a este recurso, el resultado final no ha sido el esperado, ya que el duelo ante el UCAM de hace tres semanas y el empate del domingo en casa del Mérida han servido también para poner un poco de relieve que la presencia de un tercer efectivo en la parcela ancha del campo no se ha traducido en lo que necesita el equipo, ya que contra los universitarios el conjunto grana estuvo más cerca de la derrota que del empate final, mientras que en Mérida, salvo una ocasión a balón parado de David Mateos, el equipo grana, igual que el local, pareció dar por bueno el empate sin goles demasiado pronto para un equipo, el Real Murcia, que sin que nadie discuta que Salmerón le ha cambiado la cara al cien por cien, existe el debate entre los aficionados sobre si el potencial real de la plantilla puede dar para luchar por el primer puesto o si por el contrario hay que conformarse con entrar en el play off de ascenso, aunque sea como cuarto clasificado.

Contra el UCAM (1-1) y el último domingo en el estadio Romano de Mérida (0-0) se produjo la circunstancia de que Salmerón apostó por un centro del campo formado por Armando, Juanma Bravo y David Mateos, dos centrocampistas de mucho trabajo y un central reconvertido a esta demarcación en una posición clave que hace que el equipo sea distinto prácticamente moviendo solo una pieza. Cuando Salmerón no ha apostado de inicio por el trivote, por ejemplo en la victoria ante el filial granadino, los tres hombres que hicieron estas funciones resultaron ser Armando y David Mateos, acompañados por un David Sánchez que en las últimas jornadas ha ido perdiendo fuerza y que lleva dos semanas seguidas en el banquillo.

El próximo domingo a las doce visita la Nueva Condomina el Córdoba B y la necesidad de sumar otros tres puntos después del último empate lejos de casa reabre el debate sobre qué plan tiene José María Salmerón para dentro de cinco días, si apostará de nuevo por tres efectivos en forma de 'muro' o si, como ocurrió por ejemplo ante el Melilla, optará por la figura de Fran Carnicer o Jordan Domínguez para tratar de dotar al equipo de mayor presencia en el campo contrario y tratar de aumentar así las escasas ocasiones de gol que genera el Murcia últimamente.

En palabras del propio Salmerón, la victoria ante el Villanovense de hace dos jornadas por 2-0 en Nueva Condomina fue «el partido más completo» de los granas desde que llegó el extécnico del UCAM. En esa cita, Armando y Juanma Bravo llevaron la voz cantante en el centro del campo, mientras que Jordan fue el tercer hombre elegido, en este caso para la media punta. Decida lo que decida Salmerón, el resultado final será el que dictamine si el jefe del banquillo grana acierta o falla en el once titular que presente el domingo. Y es que desde hace dos jornadas el Murcia defiende el cuarto puesto de la clasificación, algo que no consiguió en toda la primera vuelta del torneo y que debe, como mínimo, tratar de mantener todo el tiempo que pueda por sus propios intereses. El líder Cartagena, tras ganar el lunes al próximo rival de los granas, tiene siete puntos de ventaja.