El preparador albinegro, Alberto Monteagudo, reconoció a la conclusión del partido contra el Linense que esta «es una victoria que alivia», porque el conjunto cartagenerista había tropezado demasiadas veces ante su afición, y se habían escapado demasiados puntos del Cartagonova.

Este triunfo, que les permite colocarse como líderes en solitario, supone un balón de oxígeno para el de Valdeganga, que había sido muy cuestionado en anteriores citas en casa, como ante Las Palmas Atlético o ante el Betis B. Sin embargo, el equipo no dejó de sentir la presión de una afición muy exigente, que no aprobó el juego del Cartagena en la primera parte. El de Valdeganga dijo que «la grada quiere ganar y a veces no entiende que el equipo quiere ganar también».

En cuanto al desarrollo del encuentro, Monteagudo indicó que empezaron jugando bien, «con un control del juego total y terminando jugada en los primeros 10-15 minutos». «Pero a partir de ahí, nos han hecho dos uys y nos han empezado a hacer daño por pérdidas nuestras sencillas, no comprometidas». El manchego achacó esas pérdidas de balón a que los jugadores jugaban con precipitación y «estaban un poco atenazados». «La mejor virtud que tenía La Balona eran las pérdidas del Cartagena», dijo. Además, indicó que esa es precisamente una de las mayores bazas de su oponente: «La Balona no es un equipo jugón, es un equipo que te mata a la contra. Y en la primera parte les hemos dado diez o doce contras peligrosísimas».

Aunque reconoce que en la primera mitad les faltó presencia en el área rival y últimamente les está costando más crear peligro, el técnico comentó que sus pupilos entraron mucho mejor en la segunda parte, y que incluso merecieron marcar algún tanto más. «La cuestión es que llegamos bastante menos de lo que me gustaría. Ojalá que lo de la segunda parte no sea un espejismo», manifestó.

Monteagudo alabó a su guardameta, Pau Torres, que ante el Linense protagonizó una actuación muy buena. El técnico dijo que «lleva una trayectoria muy notable y cuando tiene que intervenir, interviene».

A partir de ahora se abre el debate sobre qué sucederá en el mercado invernal. El entrenador del Cartagena supone que habrá cambios y que deben hacer algunos refuerzos, pero aún no quiere centrarse en ello.

Monteagudo criticó que salgan nombres de futbolistas que se van a marchar. «Eso no ayuda. Yo sé que hay jugadores que leen ese tipo de cosas y hay jugadores les sienta mal. Y yo sé que algunos han preguntado», comentó.

Uno de los señalados para abandonar la entidad es Alberto Aguilar, que jugó de titular ante el Linense. Monteagudo dijo que estuvo serio durante los noventa minutos y que a día de hoy es un central más del equipo.

Polémica arbitral

El partido ante el Linense también dejó más de una jugada polémica. En la primera parte, el colegiado le perdonó a Chavero la segunda cartulina amarilla. Monteagudo dijo que los futbolistas de La Balona estaban dando órdenes de gritar y tirarse al suelo en cualquier disputa con el mediocentro albinegro, para forzar la segunda amarilla. Sin embargo, asumió que el árbitro podía haberle expulsado en una «falta tonta» en el primer tiempo. El técnico del Linense aseguró que la segunda tarjeta era clarísima.

Como contrapartida, el árbitro no señaló dos posibles penaltis en el área de La Balona. Monteagudo declaró que el penalti sobre Aketxe le pareció clarísimo, porque iba a rematar y le arrollaron por detrás. El que reclamaba Míchel Zabaco no lo comentó porque no vio la jugada con claridad.