Alberto Monteagudo, entrenador del FC Cartagena, reconoce que el equipo está lejos de las aspiraciones marcadas al comienzo de la temporada y que tropiezos como éste suponen un paso atrás en el compromiso de la entidad. El preparador albinegro admitía que al equipo le volvía a faltar llegada, como ha ocurrido en partidos anteriores, a pesar de que por momentos, sobre todo en la primera parte, tuvieron el dominio del partido ante un Marbella menos incisivo.

«Hemos tenido más control del juego, pero nos ha faltado generar ocasiones de gol. Cualquier error defensivo nos podía condenar tal y como así ha sucedido». Añadía el entrenador, en declaraciones efectuadas a Onda Regional, que si bien quiere que su equipo tenga el balón en todo momento, es básico que esté acompañado de verticalidad y llegada. «Me gusta el control del juego de la primera parte pero nos ha faltado chispa».

Cuando el periodista de Onda Regional le preguntó qué balance hace tras cuatro partidos sin ganar, el entrenador prefería retrotraerse al comienzo de la competición: Once partidos jugados con seis victorias -tres de ellas en la Copa- tres empates y dos derrotas, pero añadía que si bien el cómputo global es bueno, lo que está ocurriendo en estos momentos es que el Cartagena ha caído a la mitad de la tabla clasificatoria. «En once partidos hemos perdido dos, que no es un mal balance, pero en estos momentos concretos estamos más despegados de lo que deberíamos estar para cumplir nuestros objetivo».

Fueron unas cuantas las bajas con las que llegó el Cartagena a Marbella. Ni Pau, Chavero, Cordero y Álvaro González se desplazaron por diferentes motivos, circunstancia que dio pie al entrenador para lanzar un mensaje de que todos deben asumir el papel de titulares y demostrarlo sobre el terreno de juego, algo que, a tenor de sus palabras, no lo están haciendo. «Me preocupa no generar las ocasiones que hacíamos cuando empezamos la liga. Tenemos una plantilla larga y no debemos echar en falta a los que no están. Me preocupa que no sepamos asumir el rol de que todo el mundo debe sentirse titular».

Defensa de cinco

Respecto a la conveniencia o no de alinear una defensa de cinco, el entrenador si bien se mostró satisfecho por el papel de los suyos atrás, no tanto con la vocación ofensiva de sus laterales. «No hemos acertado tampoco por las bandas y dependíamos de eso. Con una defensa de cinco, los carrileros así son esenciales, pero en esta oportunidad no hemos tenido tampoco opciones».