La Copa del Rey 2016/2017 echará a andar el último día de agosto con la primera eliminatoria, en la que participarán solo equipos de Segunda División B y Tercera División. Entre ellos están cuatro de los cinco clubes murcianos que toman parte en la competición copera. Se trata del Real Murcia, La Hoya Lorca, el FC Cartagena y el Lorca Deportiva.
Este viernes 22 de julio se celebra el sorteo que dirimirá tanto los enfrentamientos de esta primera ronda como los de segunda ronda. También se decidirá en qué estadio se juegan las eliminatorias, dado que ambas son a partido único.
El Real Murcia se clasificó al ser uno de los cinco primeros de su grupo la temporada pasada en Segunda B, mientras que La Hoya Lorca y el Cartagena, 6º y 7º respectivamente, se han beneficiado de que dos de los clubes que les superaban son filiales (Sevilla Atlético y Granada B), que no juegan la Copa. Por su parte, el Lorca Deportiva disputa este torneo tras ganar el grupo XIII de Tercera División.
El UCAM Murcia, como equipo de LaLiga 2, pasa directamente a la segunda ronda que se disputa el miércoles 7 de septiembre. Los universitarios también conocerán este viernes su rival, que será otro equipo de Segunda División, ya que el formato de la Copa del Rey lleva a los equipos no profesionales por una parte distinta del cuadro durante las primeras rondas.
La tercera eliminatoria se disputará el miércoles 12 de octubre, y de ahí saldrán los 32 clubes que jugarán los dieciseisavos de final, entre los que ya estarán los equipos de Primera División. Los clubes de Segunda B que consigan alcanzar esta ronda tendrán como premio enfrentarse a uno de los seis mejores equipos de La Liga el curso pasado y que, por tanto, juegan competición europea.
Por ello lucharán los clubes murcianos, que sueñan con enfrentarse a un Primera y repetir gestas como las que protagonizaron recientemente el Alcorcón o el Mirandés. En cualquier caso, una eliminatoria contra Real Madrid o Barcelona en Copa del Rey significa, además de una alegría para afición y jugadores, un soplo de aire fresco para la economía de cualquier club de Segunda B.
