El choque ante la Balompédica Linense de la novena jornada y la derrota en casa del filial del Sevilla puso de relieve que la pareja de centrales formada por Eneko Satrústegui y Tomás Ruso, la misma que brilló con luz propia hace tres jornadas frente al Cádiz, no atraviesa por su mejor momento, ya que en las dos jornadas últimas han concedido mucho más de lo que se espera de ambos. Si unido a que junto el navarro y el alicantino también aparece la figura de un Jaime Sobregrau que lleva tres jornadas ´descansando´ desde que perdió el puesto por una sanción, no sería descabellado pensar que el catalán pueda volver al centro de la zaga. Si se cumplen las quinielas y Sobregrau vuelve al once, de la pareja actual tendrá que salir uno. En principio Satrústegui cuenta con más papeletas para quedarse como ´superviviente´ pero nadie se atreve a descartar que también pueda ´salvarse´ Tomás Ruso. Teniendo en cuenta que José Ruiz en el lateral derecho y Fernando Pumar en el izquierdo tienen el puesto casi garantizado, son los dos centrales los que tienen sobre ellos la sombra de una posible suplencia. Ya en verano, José Manuel Aira sufrió críticas por no manejar más defensas centrales en la plantilla, aunque el tiempo le ha terminado dando la razón al preparador grana, ya que con tres centrales específicos queda más que cubierta una de las parcelas claves del equipo. Tampoco es Aira un entrenador partidario de ´castigar´ a nadie, pero los fallos de los últimos partidos bien podrían traer consigo un relevo en el eje de la defensa murcianista.