La canasta de Fran Vázquez que dio el triunfo al Unicaja Málaga ante el UCAM CB Murcia ha dado mucho que hablar. En el conjunto murciano lo tienen claro: fue ilegal y, por tanto, no debería haber subido al marcador. Los visitantes, por su parte, se han defendido diciendo que había falta personal previa de José Ángel Antelo al pívot gallego. Lo cierto es que el triunfo viajó a Málaga y que los jugadores del UCAM se quedaron con una rabia contenida de saber que habían tenido muy cerca la victoria pese a haber realizado un mal partido.

El reglamento explica este tipo de acciones en su artículo 31.1.4. «Se produce una interferencia cuando: un jugador hace que la canasta vibre o agarra el aro de manera que, a juicio del árbitro, ha impedido que el balón entre en la canasta o ha provocado que el balón entre en la canasta. Si la violación la comete un jugador atacante, no se concederán puntos. Se concederá el balón al equipo contrario para que realice un saque en la prolongación de la línea de tiros libres, a menos que se especifique lo contrario en estas reglas», dice.

La explicaciones de Vázquez

  • El protagonista de la acción, Fran Vázquez, explicaba así lo sucedido: «Cogí el balón y la metí para abajo mientras me daban un golpe en la cara. Son jugadas difíciles de arbitrar. Yo voy a machacar y entra después la bola. Es complicado de arbitrar, pero ellos han decidido que era legal y yo creo que es canasta», decía. Por su parte, el murcianista Augusto César Lima expresaba en Twitter que estaba «orgulloso de mi equipo. Gracias a la Liga Endesa por haber traído el instant replay a esta maravillosa liga», decía de forma irónica.

Lo cierto es que con el reglamento en la mano, la jugada es muy dudosa. De hecho, parece ilegal. Fran captura el rebote del tiro de Markovic muy arriba y cuando se dispone en su caída a machacar el aro, el balón se le escapa. El jugador gallego al caer se cuelga del aro mientras el balón todavía está en el aire. Después entra ya con el pívot cajista viendo la jugada debajo del aro murciano.

Los árbitros, por contra, no tuvieron ninguna duda y el UCAM se quedó con la derrota. Ahora los murcianistas tendrán que visitar la pista del CAI Zaragoza el próximo domingo y recibir a la siguiente semana al Barcelona Lassa. Dos oportunidades para borrar el mal sabor de boca.