A Paco Belmonte se le ha llenado la boca desde el pasado 31 de mayo al decir que Manolo Palomeque es su primera opción para el banquillo del FC Cartagena. Le hemos oído esgrimir que él y el algareño hablan el mismo idioma y que se iban a entender muy pronto en cuanto se pusieran a conversar de su futuro ligado a la entidad albinegra. Hace una semana, el dirigente cartagenero volvía a insistir en lo mismo. Explicó en un programa de televisión que «la opción A es Palomeque y hemos de llegar a un punto de encuentro». Sin embargo, estas flores que ha ido lanzando el representante de la entidad albinegra pueden convertirse en besos envenenados, porque el grupo que lidera el empresario murciano tiene otras preferencias para dirigir el equipo el próximo año y Palomeque ha dejado de ser su principal opción para el puesto.
El Cartagena ha tanteado otras alternativas, como la de Víctor, una posibilidad que todo el mundo conoce hace tiempo, que no es nueva, pero que cobra fuerza porque los días para definirse se acercan y el ahora entrenador de la selección AFE debe decidir si quiere estar en el proyecto o no. Desde Leganés, las operaciones están dirigidas en ese sentido. Los que ponen el dinero quieren a Víctor y Belmonte podría tener que comerse sus promesas ante la imposición del que paga.
Lo cierto es que si la llegada de Víctor es más mediática que otra cosa, la permanencia de Palomeque es, además de merecida, una oportunidad para el entrenador de demostrar su valía con un equipo hecho a su medida y trabajado desde el primer minuto de pretemporada. El algareño conoce a los jugadores que se podrían quedar a la perfección y también qué futbolistas jóvenes son susceptibles de entrar a formar parte del primer equipo, puesto que, recordemos, él ha sido el culpable de que hasta seis jugadores del filial hayan debutado en un año tan complicado como el anterior.
Una oferta por cuatro años
Manolo, siempre cauto, aguarda callado la reunión de las próximas horas, aunque tiene muy claro qué es lo que va a comunicar. O es el primer entrenador del equipo o se va a su casa. Para endulzar el mal trago de no poder asumir el compromiso de fichar a Palomeque como primer entrenador, Belmonte le ha ofrecido la posibilidad de mantenerse en el club para las próximas cuatro temporadas, ahí es nada. Manolo lo tiene claro, después de salvar al equipo de la quema: descenso y posible desaparición. No tiene otro interés que formar un equipo desde los primeros pasos, sin segundos puestos ni jefaturas deportivas.
Aunque parece que las cartas están echadas y que Palomeque puede ser hoy historia en este club, no hay que descartar que las primeras opciones del FC Cartagena se desvanezcan en las próximas horas y el preparador cartagenero sea anunciado como técnico del equipo. Belmonte no ha avanzado nada de los contactos con los entrenadores ni con jugadores de forma pública, aunque esta semana parece que resultará importante para anunciar renovaciones, fichajes y campaña de abonados.
