Javier Tebas está en Colombia. Concretamente en Bogotá. Pero ni a 8.019 kilómetros se olvida del Real Murcia. Tampoco del Real Zaragoza. Son los dos equipos que desde hace dos meses sufren las constantes arremetidas del presidente de la Liga de Fútbol Profesional. Para los granas no son nuevas. La obsesión del abogado viene de lejos.

Cuando los ánimos parecían calmados en Nueva Condomina, cuando la plantilla empieza a tomar cuerpo después de la llegada de cinco fichajes y tres renovaciones, cuando Jesús Samper abandonaba hace dos semanas Murcia con un informe favorable de la Agencia Tributaria, en la madrugada del martes al miércoles, Javier Tebas hacía que los fantasmas volviesen a pasear en torno a la supervivencia de la entidad murciana.

En unas declaraciones realizadas a Efe en Bogotá, el presidente de la Liga de Fútbol Profesional advertía a los responsables del conjunto grana y a sus homólogos del Real Zaragoza que si no resuelven sus problemas económicos antes de mañana viernes, ambos clubes quedarán fuera de la competición. «Lo decidiremos a finales de esta semana; si no resuelven sus problemas de aquí al viernes el Murcia y el Zaragoza no competirán la temporada que viene».

Fue una sola frase, veintisiete palabras que vuelven a señalar al Real Murcia y a alterar a su afición, que respiraba tranquila después de que Jesús Samper señalase en su última intervención pública que el equipo jugaría en Segunda sí o sí. Ni la negociación con Hacienda para aplazar la deuda ni las denuncias ante la AFE serían un problema. Algo que quedó reforzado hace dos semanas, cuando el presidente murcianista conseguía el visto bueno de la delegación murciana de la Agencia Tributaria a su plan de pagos a cinco años. Pero aún falta una firma, concretamente el OK de la oficina central de Hacienda, y ese último paso es el que Tebas quiere tener ya encima de su mesa. A ser posible, como dice en sus declaraciones, mañana viernes.

Las salidas de tono de Javier Tebas son tan habituales que en el Real Murcia ya nadie se pone nervioso. Ayer, en la presentación de Hugo Álvarez, quinto fichaje del conjunto grana, Víctor Alonso, gerente del club, transmitía tranquilidad: «No sé en que se basa para decir eso. El presidente -Jesús Samper- tiene claros los plazos y está trabajando intensamente en ello. Siempre se ha hablado del 31 de julio como fecha máxima, así que no entiendo ni encuentro sentido a qué se refiere con lo del 25 de julio». «Nosotros seguimos actuando con total normalidad», continuaba Víctor, para dejar claro que «pronto veremos la resolución, y será en ese instante cuando la realidad ponga a cada uno en su sitio».

La misma línea de Víctor Alonso es seguida por los máximos responsables del equipo grana. Saben que lo complicado se consiguió el día que la delegación murciana de Hacienda dio el visto bueno al plan de pagos presentado por Jesús Samper y por el que se pagarán los 12 millones de euros de deuda en cinco años, y ahora trabajan intensamente para que la oficina central de la Agencia Tributaria dé el OK definitivo al aplazamiento, lo que permitiría al Murcia cumplir definitivamente con los requisitos económicos exigidos por la LFP.