La ´operación salida´ en el Real Murcia va a comenzar de un momento a otro después de que ya se hayan dado los primeros pasos en este sentido. Aproximadamente la mitad de los dieciocho jugadores que ahora mismo forman la plantilla murcianista no tienen la seguridad de si Iñaki Alonso, el entrenador del equipo, cuenta con ellos para el próximo curso en Segunda División. Y salidas van a producirse porque, por ejemplo, al canterano Gotor ya se le ha citado en Nueva Condomina para buscar una solución pacífica. Además ´Chuti´ Molina, el nuevo director deportivo del equipo, se mostró ayer tajante cuando fue preguntado al asegurar que «si llegan fichajes, algunos futbolistas tendrán que salir».

En este caso, contando las dieciocho fichas que tiene ocupadas ahora mismo el Murcia, los defensas Gotor y Luciano y los centrocampistas Urzaiz y Molino son los principales candidatos para abandonar el club después del ascenso a Segunda División. Algunos de los propios jugadores y en otros casos a través de sus representantes dejaron claro a este diario que, en líneas generales, todos van a reclamar la cantidad íntegra de lo que refleje su contrato para firmar el documento que lo desvincule de la centenaria entidad de la Región. No obstante, hay jugadores que no tienen que desvincularse de la entidad, puesto que existe la opción de que salgan cedidos a otros clubes, posiblemente de Segunda B.

José Luis Molina, el ´Chuti´, volvió ayer a insistir en que no se está marchando ni mucho menos lento en el capítulo de los fichajes: «Estamos a expensas de lo que queremos, lo sabemos desde el primer día. La afición tiene que saber que todavía estamos en tiempo y forma y muy pendientes de algunos asuntos que pueden cerrarse en un periodo muy breve de tiempo». Las palabras de José Luis Molina dejaban entrever que es muy probable que en las próximas horas se pueda hacer ya oficial el primer fichaje del nuevo proyecto. Hasta el día trece que se ha citado a la plantilla para comenzar la temporada y teniendo en cuenta la ´tranquilidad´ que lleva el mercado en tiempos de crisis, todo parece indicar que las cosas se van a ir haciendo despacio.

Por otra parte, las posibles salidas de Luciano y de Molino evidenciarían la pésima planificación deportiva que se llevó a cabo el pasado ejercicio, teniendo en cuenta que se le dio la opción de renovar por ascenso a jugadores que ahora no son tan valiosos en una categoría superior, por lo que tocará negociar y perder dinero en el camino. Aún así, el Consejo de Administración grana tiene muy claro que no tiene intención de hacer una ´limpieza´ muy abultada de la actual plantilla, entre otras cosas, porque la economía del club no permite tomar las medidas que se llevaban a cabo en este tipo de situaciones hace relativamente poco tiempo.

No obstante, los planes de Iñaki Alonso son los de hacer mucho más extensible la operación salida para dejar más huecos libres y poder incorporar a más jugadores. Serán las negociaciones las que vayan marcando los tiempos de este trance que tienen que pasar todos los clubes cuando celebran un ascenso, es decir, descartar futbolistas agradeciéndoles los servicios prestados.