La XIX edición del Jazz San Javier, que se viene celebrando desde el pasado 1 de julio, sigue sonando a jazz de altura. Afronta su recta final este fin de semana con las actuaciones de los vocalistas Sarah Mckenzie y Kevin Mahogany (que recibe el premio del festival), acompañados en su programas por el London Gospel Choir y el cuarteto del ilustre patriarca del jazz de New Orleans Ellis Marsalis. Un cierre a la altura del festival y de una formidable edición, que ha ofrecido brillantes actuaciones y descubrimientos.
Centrándonos en el programa de hoy, la cantera de vocalistas femeninas de jazz no cesa de lanzar al mercado nuevas incorporaciones que intentan llenar (casi imposible) el espacio creado y dejado por las grandes voces del jazz.
Una de las últimas en llegar, o mejor dicho, en aparecer sobre escenarios internacionales, es la joven cantante australiana Sarah McKenzie, que además es una notable pianista y compositora. Estará presentando en Jazz San Javier su tercer disco como líder: We Could Be Lovers, un trabajo muy correcto producido por Brian Bacchus, productor de Norah Jones y de Gregory Porter, donde esta joven veinteañera interpreta desde temas propios (tres llevan su firma) a standars del jazz firmados por luminarias como Betty Carter, Cole Porter, Duke Ellington o Abbey Lincoln.
AunqueWe Could Be Lovers es el primer disco de Sarah McKenzie con distribución internacional y apoyada por un sello de tanto prestigio como Impulse!, esta joven graduada en el WAAPA (West Australian Academy Performing Arts) y en el Berklee College of Music de Boston (buenas referencias académicas no le faltan), ya tenía en su país de origen una incipiente e importante carrera, y dos discos en el mercado: Don´t Tempt Me, que significó su debut discográfico, y Close Your Eyes, con el que ganó el premio ARIA (algo así como los Grammy australianos) al mejor álbum de jazz en 2012.
Esta pianista a la que ya llaman la nueva Diana Krall ha estado de gira con Michael Bublé, Chris Botti y John Patitucci, músicos que han mostrado aprecio por su particular tímbrica y su groove exquisitamente jazzy al pianoforte, muy próximo al estilo de Shirley Horn. Para su tercer disco, McKenzie estuvo acompañada por miembros australianos de su banda, como el guitarrista Hugh Stuckey y el bajista Alex Boneham, y algunos destacados músicos de primera línea del jazz actual, como el vibrafonista Warren Wolf y la trompetista Ingrid Jensen, entre otros.
Sarah McKenzie es un tesoro musical: una voz destacada, una presencia incontestable, notables composiciones y un gran talento. Jazz clásico, melódicas baladas y un swing radiante.
En su debut de Jazz San Javier la acompañarán Jo Caleb (guitarra), Pierre Bousaguet (contrabajo) y Marco Valeri (batería).
El coro del Rey León
El London Community Gospel Choir (LCGC), fundado en 1982 por el reverendo Bazil Meade, es uno de los coros de gospel más reconocidos del Reino Unido, con una aclamada trayectoria musical internacional. Premiado internacionalmente en numerosas ocasiones, Meade es un músico total: cantante, compositor, director, arreglista y productor del género gospel. Junto con Lawrence Johnson, Delroy Powell y John Francis compartió un objetivo común: crear un coro gospel de jóvenes de diferentes confesiones religiosas donde reunir a los mejores músicos y cantantes, ofreciendo así una imagen positiva de la juventud británica africana en el Reino Unido, y llevar la música gospel a salas, iglesias y lugares donde antes no se atrevían a programar este género.
El LCGC logró hacer historia al ofrecer el primer concierto de un coro gospel en el Reino Unido. Versátil, flexible y conocido por interpretar sonidos dinámicos y crear ricas armonías, participó en la banda sonora de El Rey León y en colaboraciones con artistas como George Michael, Jessye Norman, Sting, Elton John, Puff Daddy, Mariah Carey, Blur, Martine McCutheon, Gary Barlow, Diana Ross, Paul McCartney, Westlife, Celine Dion o Tina Turner, entre otros, en actuaciones en vivo, vídeos y grabaciones de estudio.
Progresivamente ha ido creciendo, y en la actualidad lo integran más de 200 miembros de todas las áreas de Londres y sus suburbios. Es conocido por su estilo de gospel ´up-tempo´, swing-beat, r'n'b tradicional, con arreglos llenos de emoción, estimulante coreografías y ejercicios vocales.
El coro funciona como un gran conglomerado de culturas y estilos que colorean el gospel con todo tipo de influencias, desde la más pura tradición americana a pinceladas caribeñas y africanas. Durante el concierto que ofrecerán esta noche, y a petición expresa de la dirección del festival, incorporarán a su repertorio un tributo a los Beatles pasados por ritmos como el funky gospel o el soul más tradicional.
