Nacido en la diputación cartagenera de El Llano del Beal, Nicolás Hernández Úbeda, Nico para muchos amigos, empezó a trabajar desde muy joven y pronto se puso al frente de un supermercado que heredó de sus tíos en El Estrecho de San Ginés.

Más tarde, a principios de los años 60 montó su propio supermercado 'Upper Nima' en Mar de Cristal, uno de los primeros establecimientos del sector de la alimentación en el Mar Menor, señaló su hijo Ginés Hernández.

"Fue pionero en Mar de Cristal. En aquella época apenas había dos o tres casas. Tuvo una gran visión empresarial y fue consciente del futuro turístico de esta zona, así que con enorme sacrificio y ganas de trabajar decidió abrir los 365 días del año", recordó su hijo, quien se encarga del supermercado de Mar de Cristal y también del establecimiento de El Estrecho de San Ginés, desde que su padre se jubiló.

"Estuvo más de cincuenta años al frente del supermercado. Era la persona más conocida de Mar de Cristal. No tenía enemigos, todo el mundo lo quería: era honrado y muy trabajador. Se comprometió a abrir todos los días en una época en la que no había ningún supermercado en la zona", señaló ayer el ex concejal del ayuntamiento de Cartagena, Carlos Fernández de la Cruz, a su salida del velatorio.

En su juventud Nicolás fue árbitro de fútbol, del club La Deportiva Minera de El Llano del Beal. "En aquella época no había medios de transporte y los clubes tenían sus propios árbitros. Recuerdo que compraba y memorizaba los manuales de Pedro Escartín, quien fue presidente de los árbitros durante muchos años en España", señaló su hijo.

Seguidor del Atlético de Bilbao, acabó contagiándose de la afición por el Real Madrid de sus hijos y nietos. "Vivíamos puerta con puerta en El Estrecho de San Ginés y al final acabó siguiéndonos a todos", dijo.

Casado con María Antonia Zapata Vidal, fue padre de tres hijos -Ana María, Ginés y Saturnina- y abuelo de seis nietos. Su familia era su vida, más allá del trabajo y el poco tiempo libre que le dejaba el supermercado siempre se lo dedicó a su familia y a sus amigos.

"Siempre nos dio muy buenos consejos. Era noble, sencillo y hogareño, muy amigo de sus amigos, honesto y muy trabajador, además de muy buen padre. Estaba muy centrado en sus obligaciones de trabajo y apenas tenía tiempo libre", comentó Ginés, quien no dudó en elogiar a su progenitor. "Puede parecer un tópico, pero no lo es: era una gran persona".

Nicolás Hernández Úbeda falleció el pasado jueves, 10 de septiembre, a los 84 años. Familiares, amigos, vecinos de Mar de Cristal y clientes de Nicolás de toda la vida acompañaron a la familia en el velatorio que tuvo lugar en el nuevo tanatorio del Mar Menor 'Dos Mares'.

La misa funeral por el alma del fallecido, se celebró ayer en la iglesia de la diputación de El Estrecho de San Ginés. Posteriormente fue trasladado al cementerio de San Ginés.