Por sectores, el de los productos industriales y tecnológicos y el agroalimentario lideran un año más las exportaciones regionales, con un volumen de ventas de 5.304,75 millones de euros y 4.251,20 millones de euros, respectivamente. El grueso de esos 5.304,75 millones de euros, a su vez, corresponde a combustibles y lubricantes, que con 2.859 millones de euros se recuperan con respecto al año pasado sin llegar a niveles como los de 2014, cuando los más de 4.000 millones de euros generaban una importante dependencia de los productos energéticos.

La industria química, uno de los sectores estratégicos de la economía regional, experimenta también un crecimiento del 14,41 por ciento y se sitúa en los 1.113,16 millones de euros, apuntan las mismas fuentes.

Así, junto a estas áreas destacan otros como el de las bebidas, que pasa de 457,64 millones de euros a 507,48 millones de euros (10,89 por ciento) gracias al incremento del 11,66 por ciento registrado por las ventas de vino, o el de bienes de consumo, que se mantiene en niveles similares a los de 2016 con un total de 393,30 millones de euros.

Al respecto, el consejero de Empleo, Universidades y Empresa, Juan Hernández, ha destacado el incremento de empresas exportadoras, que se elevan a las 4.999. «Cada vez se va ampliando más la base de empresas que se están sumando a ese proceso de internacionalización», según Hernández, lo que «garantiza que estas empresas van a estar en condiciones de soportar mejor las adversidades económicas que se presenten en el futuro, con lo que estamos fortaleciendo nuestro tejido productivo».