Alrededor de 15.000 personas se encuentran retenidas en el aeropuerto de Madeira desde el pasado sábado a causa de la cancelación de numerosos vuelos por los fuertes vientos registrados en el archipiélago, según cuenta una de las afectadas, la murciana María Dolores Cabrera. Ella es de Beniel, y junto a su marido y sus dos hijos son parte de los trece murcianos que tenían previsto su regreso a Madrid y que llevan más de 48 horas esperando a que los reubiquen «sin obtener respuesta».

«Llegamos a la isla el día 29 de julio para pasar las vacaciones», comenta Cabrera, que relata que una semana más tarde, «cuando solo quedaba una hora para nuestro vuelo a Madrid», se enteraron de que se cancelaba por la desfavorable situación meteorológica.

«Entendemos las medidas de seguridad, pero no entendemos que dos días después aún sigamos sin saber cuándo vamos a poder volver a nuestra casa, ya que hay otros vuelos que sí están saliendo», apostilla indignada. «Los que peor lo están haciendo son los de Iberia, que no responden a nuestras reclamaciones ni de twitter, ni de email ni de vía telefónica».

De momento los afectados están pasando las noches en pensiones de Madeira a las que les han enviado, pero el resto del tiempo lo pasan «tirados, cansados, acarreando las maletas» en el aeropuerto internacional Cristiano Ronaldo.

«Esto está tan colapsado que Iberia tendría que mandar aviones vacíos para poder llevarnos a todos de vuelta», reclama la murciana, que dice sentirse «impotente». «Nosotros tenemos nuestro coche estacionado en un parking de Madrid y ahora nos van a cobrar muchísimo», comenta preocupada, y añade: «Mi marido tenía que incorporarse al trabajo esta semana y mi hijo tiene una cita médica el miércoles, y ahora nos dicen que quizá con suerte el próximo sábado podamos volar».

«Abandonados» por Iberia

Operadores de Iberia afirman que están «trabajando en ello para reubicarlos», aunque María Dolores Cabrera insiste en el estado de «abandono» que están sufriendo por parte de la compañía aérea.

«Nos acercamos a las ventanillas de aquí, a las que trabajan en nombre de Iberia, y no hacen más que mandarnos de una a otra, o pedirnos que les hablemos en portugués». Subraya que la aerolínea les contestó vía correo electrónico que tendrían una respuesta «en un plazo máximo de 21 días». «Lo único que queremos es salir ya de aquí, aunque sea a través de un trasbordo y no vayamos directos a Madrid, pero ni siquiera nos dan esa opción», manifiesta. Advierte también que se ha puesto en contacto con su agencia de viajes y «ya han hablado con sus abogados para tomar medidas al respecto, porque esta situación es vergonzosa».

Por su parte, el Instituto Portugués del Mar y la Atmósfera mantiene activa la alerta amarilla en Madeira e informa de que se prevén rachas de viento de hasta 80 kilómetros por hora.