La Asamblea Regional ha dado luz verde hoy a una moción de Podemos en la que piden el cese de las capturas ilegales de fringílidos silvestres en la Región, cuyo principal objetivo es amaestrarles para el canto y que genera un mercado negro muy lucrativo.

En un comunicado, la diputada regional de la formación morada María Giménez ha señalado que la captura de estas especies silvestres es ilegal, como también está prohibido usar redes abatibles o similares para sacarlos de su entorno natural y mantenerlos en cautividad.

Giménez ha censurado que ningún partido quiera parar una práctica que ha provocado que en la última década se hayan capturado 88.000 ejemplares de una especie protegida por la legislación europea, una cifra que ha estimado "muy alejada de toda lógica de pequeñas cantidades" y que permite la captura en detrimento del desarrollo de la cría en cautividad.

Giménez ha asegurado que la Región de Murcia debe seguir la estela de otros territorios que ya han decretado el cese de las capturas de fringílidos, como Cantabria, Asturias y Navarra y Guipúzcoa y han prohibido de manera indefinida esta práctica, además de Castilla y León y Cataluña que han suspendido temporalmente las autorizaciones.

La diputada de Podemos ha sacado adelante la moción presentada por el grupo parlamentario para que se cumpla la ley porque, "al margen de cuestiones deportivas, hay un mercado negro donde el furtivismo resulta frecuente y muy lucrativo".

María Giménez ha añadido que a esta situación se añade que tanto el jilguero como el pardillo "se encuentran en declive moderado en España. Indudablemente, la situación de declive hace aún más insostenible el mantenimiento de esta práctica".

La alternativa, como ha contado Giménez, es la cría en cautividad "práctica satisfactoria tal y como se viene haciendo en diversos países europeos" puesto que además, Europa ya ha alertado a España de que puede enfrentarse a una multa al incumplir la Directiva de Aves.