Con rezos desde primera hora de la mañana y el sacrificio de un cordero para compartir entre la familia, los amigos y los más necesitados.

Así celebraron ayer las más de 100.000 personas que forman la comunidad musulmana de la Región el 'Eid al Adha' o Fiesta del Sacrificio o del Cordero, la más importante del año para los creyentes del Islam tras la del fin del Ramadán y que se conmemora a escala mundial.

Se trata de una fecha muy señalada para los musulmanes que coincide con el fin del peregrinaje anual a La Meca y en la que se recuerda el sacrificio del cordero que Abraham realizó como ofrenda a Dios en lugar de a su descendiente. Tradicionalmente, las familias se reúnen para comer juntas, intercambian visitas y comparten el cordero con las personas más desfavorecidas. Antes del sacrificio, a primera hora de la mañana, muchos musulmanes acudieron a rezar a las mezquitas, tal y como marca la religión islámica. En el polideportivo del Infante se reunieron centenares de fieles de todas las edades.

El presidente de la Comisión Islámica de España (CIE), Riay Tatary, explica que el sacrificio del cordero no es una obligación, como sí lo es la peregrinación a La Meca -uno de los cinco pilares del Islam-, sino una recomendación firme del Profeta para familias que puedan permitírselo. En cualquier caso, muchos musulmanes lo hacen cada año siguiendo la normativa y otros donan sus corderos a países más necesitados como Siria o Somalia.

Además, en las mezquitas se hacen fiestas propias para que los niños disfruten de esta festividad. Los musulmanes se engalanan con sus mejores ropas para conmemorar este importante día.