Murcia será parte central de un futuro proyecto de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el control y eliminación de la enfermedad de chagas en Europa. Su pionera experiencia de más de un lustro en la prevención, control y tratamiento de esta dolencia tropical desde un punto de vista multidisciplinar la ponen a la cabeza.

«Murcia es un modelo a seguir porque ha logrado destruir estigmas y preconceptos que han sido tremendas barreras para el diagnóstico de esta enfermedad», dijo el responsable del programa de Chagas en la OMS, el doctor Pedro Albajar, de visita en Murcia.

El principal desafío que hay para avanzar en el control y eliminación de estas enfermedades «es detectar precozmente», de ahí la importancia del programa de Murcia, que ha logrado un equilibrio entre lo biomédico y lo psicosocial, «que es difícil hacerlo».

La enfermedad tiene dos peculiaridades: suele ser asintomática hasta que es tarde; y en los países de origen (América Latina, principalmente), padecerla genera un estigma, el de la pobreza, en los enfermos.

El Servicio Murciano de Salud (SMS) lleva seis años celebrando una jornada 'de puertas abiertas', con la que se pretende es facilitar a las personas que acudan a hacerse la prueba diagnóstica, que es gratuita.

La Unidad de Medicina Tropical del hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia está abierta de lunes a viernes, pero muchos tienen complicado el desplazamiento hasta Murcia; otros, debido a cuestiones socioculturales, son reacios a pasarla.

El domingo pasado, 511 personas se desplazaron hasta la Arrixaca, según los datos facilitados por el jefe de la Unidad, Manuel Segovia, frente a las 800 del año pasado. En total, desde que se puso en marcha el programa, se han realizado pruebas a 15.000 personas. Un análisis de sangre es suficiente para tener un diagnóstico.

La Unidad ya ha tratado más de dos mil casos, «la inmensa mayoría importados», aunque también hay chagas congénitos, transmitido de madre a hijos ya nacidos en Murcia, explicó Segovia. Todos los casos fueron curados.

Uno de los elementos que destaca de estas jornadas el experto de la OMS en enfermedades tropicales es que se han roto varios tópicos: mirar la enfermedad no ya como un problema, sino como una oportunidad de diagnóstico precoz y tratamiento rápido; e implicar a todos los posibles actores de manera multidisciplicar para cambiar el mensaje entre la población.