La Audiencia Provincial de Murcia ha ordenado el ingreso en un centro psiquiátrico durante cinco años del hombre que en agosto de 2013 causó el incendio de su casa al quedarse dormido con un pitillo encendido. La sentencia ha sido dictada tras la conformidad alcanzada por el fiscal del caso y su defensa, y en la misma se acuerda la absolución del acusado, imponiéndole, a cambio, esa medida de internamiento. El fuego se propagó al resto de la casa y obligó a desalojar al causante del incendio y a su padre, que reside en la misma vivienda. Ambos fueron rescatados por la Policía.

Afirma el tribunal que el denunciado, que padece un trastorno de la personalidad epileptoide por el consumo prolongado de alcohol y otras drogas, se metió en su dormitorio a descansar «y, falto de las más elementales cautelas, encendió un cigarrillo, quedándose dormido con el mismo en la mano, originándose un fuego en la cama».

Aunque se despertó, como estaba aletargado por el sueño, «se limitó a echar un poco de agua en la zona incendiada, y continuó descansando, hasta que se percató de que las llamas se habían propagado al resto de la casa.

El fuego puso en peligro no solo su propia vida, sino, también, la de su padre, que reside en la misma vivienda.

Avisada la Policía Nacional, varios agentes se presentaron en la vivienda, logrando sacar a la calle a padre e hijo.

La casa sufrió daños importantes tanto en el edificio, cuya techumbre se vino abajo, como en el mobiliario.