El Índice Global de la cuenca del Segura ha entrado en estado de alerta a causa del empeoramiento de la situación hídrica de los regadíos del trasvase Tajo-Segura, según informó ayer la Confederación Hidrográfica del Segura, donde se celebró la Junta de Gobierno en la que se estudió la aplicación del decreto de sequía.

Específicamente, están en alerta las zonas regables, que son 130.000 hectáreas del trasvase, que están en situación de emergencia y sus recursos están bajando. Esto quiere decir, según explicó el presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), Miguel Ángel Ródenas, que a partir de octubre se pueden presentar dos escenarios diferentes. En primer lugar, puede producirse un año con una pluviometría normal y se pueda remontar la situación o que sea necesario intensificar las medidas para corregir la sequía.

En su opinión, de momento, hasta final del año hidrológico la situación está «controlada» con las medidas que se han adoptado, y la «incertidumbre» puede llegar a partir del 1 de octubre.

También la consejera de Agua, Agricultura y Medio Ambiente de Murcia, Adela Martínez-Cachá, admitía que las previsiones «no son nada favorables» por lo que considera importante que todos los asistentes a la Junta de Gobierno «queden perfectamente informados del avance del Decreto de Sequía» y sobre qué escenario se puede plantear, sobre todo, a partir del 30 de septiembre, cuando empieza el nuevo año hidrológico.

No obstante, la consejera cree que es, incluso, «más preocupante» el escenario que se abrirá a partir del 31 de diciembre, cuando se acabará el plazo en el que está activo esa situación de emergencia dada por el Real Decreto de Sequía.

En marcha todas las actuaciones

La CHS ha informado de que ya se han puesto en marcha todas las actuaciones encomendadas al organismo de cuenca, que han implicado la inversión de 30 millones de euros en diversas medidas para el suministro de recursos hídricos extraordinarios a los regantes, como la apertura de pozos, los intercambios de derechos y la construcción de una conexión entre la desaladora de Águilas y el Valle del Guadalentín.

«La aplicación de estas medidas, además de la gestión de las reservas embalsadas, ha permitido que a pesar de la situación de sequía, los agricultores estén regando con normalidad y a un ritmo similar al del año pasado», añade la fuente.

Además, la Junta de Gobierno también trató el proceso de planificación abierto para la elaboración del nuevo Plan Hidrológico de la Demarcación del Segura. la Confederación ha celebrado seis mesas territoriales de participación y cuatro temáticas para conocer la opinión de los interesados acerca del nuevo texto y recoger sus propuestas.

Hasta el momento se han recibido más de un centenar de aportaciones al nuevo plan, un número ligeramente inferior a las presentadas en el anterior.Las propuestas fueron analizadas ayer mañana en la Comisión de Planificación, que se celebró en Murcia, con la finalidad de mejorar el documento definitivo que se presentará en el Consejo del Agua del próximo mes de septiembre. La CHS pretende así cumplir los plazos marcados por la Unión Europea para la aprobación de los planes hidrológicos de demarcación.

«El 31 de diciembre de 2015 tenemos que tener el Plan Hidrológico de cuenca aprobado», según Ródenas, quien señala que si no se consigue este objetivo «podrían ponerse en riesgo los fondos europeos y otras medidas muy duras», por lo que «debemos de trabajar todos para cumplir los plazos establecidos». A día de hoy, ha ratificado que el calendario que maneja la CHS «permite cumplir con esta previsión».