Se acercaba el mediodía cuando Bárbara García Balsas estaba preparando la comida y escuchó "una espeluznate explosión". Se acababa de iniciar el incendio en ElPozo Alimentación. El estruendo alertó a la gran mayoría de vecinos de Alhama, que se agolparon en los alrededores de las instalaciones de la fábrica para conocer noticias sobre el incendio e interesarse por si había heridos. Posteriormente, hubo otras tres explosiones más.

Y es que los alhameños no olvidarán fácilmente el 15 de enero de 2010. En los alrededores de ElPozo Alimentación, la gente sacó sus teléfonos móviles y se entretuvo grabando la enorme columna de humo que se había formado. "Ya verás mañana en YouTube", señalaban algunos curiosos.

La expectación por el incendio de la empresa cárnica llegó también hasta los conductores que circulaban por la autovía del Mediterráneo (A-7), próxima al lugar donde se encuentran las instalaciones de la compañía perteneciente al Grupo Fuertes. Llegando a vulnerar en algunos casos la normativa de tráfico, algunos vehículos circulaban a una velocidad inferior a la mínima permitida en una autovía (60 kilómetros por hora) para poder captar imágenes del fuego.

Asimismo, al estar la estación de ferrocarril de Alhama de Murcia próxima a la sede de ElPozo Alimentación, numerosos vecinos se concentraron junto a las vías del tren para seguir en directo el incendio. Este hecho motivó retrasos de entre 10 y 15 minutos en el tren de cercanías que realiza su recorrido entre la capital murciana y la ciudad de Lorca, que tiene una parada en la estación alhameña.