Hoy en día hay que estar atento al calendario hasta cuando uno se va a morir. De este modo, en Cartagena, según el momento del fallecimiento, los familiares se ven obligados a velar el cuerpo más de una noche. El problema es que no se entierra las tardes del fin de semana en los cuatro cementerios municipales: San Antón, Los Remedios, San Ginés de la Jara y San Roque (Alumbres).

La ley dictamina que hay que esperar 24 horas para decir el último adiós a un difunto. Así que, si se produce un deceso durante la tarde del viernes o del sábado, los allegados del ser querido tienen que pasar dos noches en el tanatorio velando el cuerpo. Esto repercute en el bolsillo de los familiares, ya que una noche extra de velatorio cuesta alrededor de 500 euros.

Las empresas funerarias hacen caja con esto; no obstante, los propios tanatorios de Cartagena solicitan al Ayuntamiento que se apiade de los familiares y contrate personal para cubrir el servicio durante el turno vespertino de los fines de semana y los festivos, que tampoco se hacen inhumaciones por las tardes. «En todos los camposantos municipales de la comarca se entierra las tardes del fin de semana. Cartagena es el único lugar donde no se puede. Nunca es plato de buen gusto estar un día más velando el cuerpo, más aún si la muerte se produce de forma dramática o es una persona joven. Poniendo a un enterrador de retén se podrían evitar gastos y el sufrimiento que conlleva un duelo de dos días», sostienen los empresarios de pompas fúnebres.

El concejal de Calidad de Vida, Francisco Calderón, responsable de estos menesteres, sostiene que «hasta ahora no había caído en la cuenta de este problema porque ningún cartagenero, ni asociación, me ha transmitido queja alguna». El edil apunta que «de momento, las cosas van a seguir como están», aunque promete que cubrirá el servicio de enterrador en las tardes del fin de semana si lo demandan los ciudadanos. De todos modos, Calderón concluye que llevará esta propuesta a la próxima reunión que tenga con los representantes de las juntas de los cementerios municipales.