El maratoniano pleno municipal de ayer acabó con un choque entre los dos partidos que componen el Gobierno municipal. Movimiento Ciudadano y PSOE no se pusieron de acuerdo en los pasos a dar para extinguir la concesión del agua. El partido del alcalde abogó por finalizar la concesión con Hidrogea este próximo año, mientras que el de la vicealcaldesa teme que esto pueda acarrear el pago de una multa de 60 millones de euros.

El problema, según los socialistas, radica en que el pleno le otorgó una prórroga a Hidrogea hasta 2042. Ésta fue aprobada de forma unánime en 2003 por PP, MC, Izquierda Unida y PSOE. El partido del alcalde estudia ahora la legalidad del acuerdo. Hay dos procesos contenciosos abiertos en los juzgados para ver si esta prórroga es legal o no; ya que el contrato inicial establecía que, después de 2017, se renovaría cada lustro hasta un límite de 25 años.

MC no contó ayer con apoyos suficientes en el pleno para sacar su plan adelante. Sólo tuvo el voto favorable de Cartagena Sí Se Puede. El PSOE se abstuvo, pero a última hora presentó una moción en la que mostraba su hoja de rumbo. Ésta fue aprobada por el pleno pese a la abstención de MC y la negativa de Cartagena Sí Se Puede. Ahora, el Ayuntamiento estudiará si es viable revocar el acuerdo de prórroga de 2003 sin quebrar las arcas públicas.