Las dos asociaciones de vendedores ambulantes del municipio están indignadas por la masiva afluencia de manteros o vendedores ilegales en los mercadillos del municipio, sobre todo, en los más grandes. Este es el caso del mercado de Los Dolores, Cabo de Palos y el de la Urbanización Mediterráneo».

«Desde que quitaron la pareja de policías que se encargaba de vigilar los mercadillos, la situación ha ido a peor», dijo Juan Domenech. Del mismo modo, Andrés Montesinos de Acosur, indicó que hace falta más vigilancia policial, aunque somos conscientes de que no es un problema que se arregle de un día para otro».