El Oráculo de Tanit era un acto vedado para los hombres debido a que es la representación con la que los carthagineses rinden un homenaje a las mujeres. Sin embargo, en esta edición los varones ya pueden participar activamente. «El acto sigue siendo un homenaje a las mujeres, pero qué mejor forma de homenajearlas que contar con los hombres para hacerlo», explica el sufeta carthaginés, Ramón Jerez. Hasta ahora sólo actuaban en la representación de cinco a diez hombres, cifra que se ha visto multiplicada con la presencia de numerosos figurantes de las veinticinco tropas.