El museo arqueológico municipal Enrique Escudero ha reabierto sus puertas este mes tras una serie de mejoras en el sistema eléctrico del edificio que han supuesto una inversión de unos 200.000 euros con cargo a los fondos del Plan E que financia la administración central.

El museo ha tenido cerradas sus puertas buena parte del verano para que se pudieran realizar los trabajos que desde ahora le permiten contar con un sistema de iluminación que incrementa la seguridad del edificio y que mejora las condiciones de visita a la necrópolis tardorromano, que fue descubierta en los años 60, sobre la que se asientan estas instalaciones.

Un responsable del museo arqueológico municipal ha indicado que las obras han supuesto, entre otras cosas, la colocación de un transformador y un generador que optimizarán el gasto de electricidad y aumentarán las condiciones de seguridad en caso de un corte del fluido.