El consumo de cocaína y de cannabis en España se mantuvo el año pasado a niveles de 2012, lo que sitúa a este país como uno de los mayores consumidores de estas dos sustancias dentro de la Unión Europea (UE).
Así se desprende del último informe anual del Observatorio Europeo de las Drogas y Toxicomanías (OEDT), publicado hoy en Lisboa, -que analiza 28 países de la UE más Noruega y Turquía- y que llama la atención sobre el consumo de estupefacientes en el continente.
En España, el segundo mayor consumidor de cocaína de la UE, un 8,8 % de los adultos la han consumido alguna vez en su vida, un porcentaje sólo superado por el Reino Unido, con un 9 %.
Por otro lado, España se sitúa en quinta posición en cuanto a consumo de cannabis, con un 27,4 % de adultos que lo fuma a lo largo de su vida.
El director del OEDT, Wolfang Götz, consideró hoy durante la rueda de prensa en la que se presentó el informe, que hay una "clara relación" entre el uso de drogas y el desempleo, que en España ronda en torno al 25 %, porque el parado tiene más tiempo libre y menos dinero para gastar.
En ese sentido, Götz matizó que hay dos escenarios posibles: la persona esta más deprimida, por lo tanto consume más drogas o simplemente tiene menos dinero y, de ese modo, menos capacidad para tomar estas sustancias.
El director de la unidad de epidemiología del OEDT, el español Julián Vicente, explicó a Efe que el consumo de cocaína en España ha caído ligeramente, cerca de un 0,2 % comparado con 2012, debido a la incidencia de la crisis económica.
"La cocaína siempre ha sido una droga de consumo recreativo y ahora simplemente la gente tiene menos dinero para salir de fiesta", afirmó Vicente, quien alertó de que, pese a ello, el uso de cocaína continúa siendo "muy elevado" en España.
España, una de las rutas del narcotráfico
La península Ibérica es una de las mayores puertas de entrada de cocaína en Europa, junto con Holanda, puesto que se produce en Perú, Colombia y Bolivia y es escondida en contenedores que llegan al continente vía marítima.
Asimismo, gran cantidad del cannabis que llega a Europa lo hace a través de la península debido a su cercanía con Marruecos, donde hay extensos campos de cultivo, aunque en los últimos años ha proliferado la creación de invernaderos en países centroeuropeos como Holanda y la República Checa.
Según un informe de la ONU publicado en marzo, España decomisa el 30 % de la cocaína y el 75 % de la resina de cannabis de Europa.
No obstante, ese mismo informe destacó una caída de aprehensiones en España y Portugal, debido a la creciente diversificación de las rutas del narcotráfico para entrar en el mercado europeo.
