50 años de Anse

Justo hoy, hace medio siglo, así como suena, la Asociación de Naturalistas del Sureste (Anse) celebraba su asamblea fundacional. Esta misma tarde, Anse lo celebra con un acto en la Fundación Mediterráneo, donde homenajeará a alguno de sus fundadores, y una cena de socios que seguro que será masiva y entrañable. 

Se cumplen cincuenta años de esfuerzo altruista e independiente, de lucha, de trabajo y conciencia a favor de la naturaleza. Cincuenta años de campañas, de estudios, de manifiestos, de reuniones y congresos. Cincuenta años de logros conseguidos que solo apuntan a los muchos otros logros que aún les quedan por alcanzar.

Hay que hacerse una idea del mérito de la asociación cuando allá por 1973 celebraba su asamblea de inicio. En aquel año aún faltaban dos para que en España se empezara a pensar en que era posible la democracia. Las reuniones estaban sujetas a la concesión de un estricto permiso gubernativo, y para qué decir la posibilidad de crear y registrar un grupo organizado. El Icona estaba recién creado, el Parque Nacional de Doñana apenas hacía cuatro años que había echado a andar, y sólo en aquel año de 1973 fue cuando comenzó a emitirse la serie televisiva El hombre y la Tierra, que tanta influencia habría de reportar hacia los jóvenes naturalistas. Si España estaba en periodo de pre-desarrollo, imaginen Murcia.

La historia de Anse es tan larga que es casi imposible de resumir. La tienen disponible en su página web. Dos años antes del acta fundacional, en 1971, cuatro pioneros habían fundado el Grupo Ornitológico del Sureste. En 1972 eran ya 20 personas y, con la incorporación de algunos socios cartageneros de la Sociedad Española de Ornitología, pronto alumbraron el que a partir de 1973 iba a ser uno de los principales grupos españoles de estudio y defensa de la naturaleza.

Poco a poco, desde entonces, la marcha de Anse ha sido demoledora, acumulando incontables iniciativas que tuvieron gran responsabilidad en que actualmente contemos, casi de milagro, con espacios naturales aún disponibles para la conservación. 

En el haber de Anse se cuentan infinidad de estudios, anillamientos, censos, publicaciones y trabajos de campo, con los que ha sido más fácil afrontar la conservación de la biodiversidad. Y como seña de identidad, una gran cantidad de colaboraciones y de alianzas que han contribuido a reforzar en nuestra región y en toda España el movimiento ambientalista. 

Y ante todo, Anse es responsable de una catarata de protestas, de escritos, de denuncias y de papeles registrados en todas las administraciones con las que la realidad legal de la protección de la naturaleza ha ido avanzando, a pesar de los pesares, así como montañas de iniciativas educativas, divulgadoras y de comunicación, con las que nuestra conciencia ambiental ha ido creciendo en paralelo. 

Sin olvidar pioneras y potentes acciones de custodia del territorio para hacer que el futuro de la gestión del medio natural vaya encontrando una esperanzadora puerta entreabierta entre tanto mercado.

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