Los fondos de recuperación Next Generation EU, que la Unión Europea ha acordado poner en marcha para estimular la economía tras la parálisis de la pandemia, suponen una oportunidad de oro para que la Región de Murcia dé un salto cualitativo en cuanto a inversión y desarrollo de proyectos estratégicos, que corrijan deficiencias históricas y los castigos a los que nos viene sometiendo el Gobierno de Sánchez.

En concreto, de los 140.000 millones de euros previstos para España en el reparto de esos fondos, la mitad irán a ayudas directas y proyectos de inversión a fondo perdido. Son unos 77.000 millones de euros que permitirían culminar infraestructuras, inversiones y proyectos de capital importancia para el presente y el futuro de la Región de Murcia.

En la Asamblea Regional registramos una iniciativa en la que solicitamos que se tenga en cuenta el Plan Vertido Cero al Mar Menor, que actualmente el Gobierno de Sánchez tiene en un cajón, para que pueda considerarse como uno de los proyectos a concurrir a las ayudas europeas. En realidad, son muchos los planes estratégicos de interés para la Región de Murcia que están en juego: el AVE, el Corredor Mediterráneo, el Gorguel, las ZAAL de Cartagena y Murcia, la regeneración de la Bahía de Portmán, y muchos más merecedores de toda ayuda que supondrían un gran impulso para nuestra Región.

Consciente de la gran ocasión ante la que nos encontramos, el Gobierno regional ha impulsado NEXT CARM, una iniciativa que pretende ser el mayor laboratorio de ideas de la Región hasta la fecha. El presidente, Fernando López Miras, quiere contar con la participación de todos, con el fin de elaborar las mejores propuestas y proyectos posibles con la máxima colaboración, cooperación, consenso y diálogo, para lo que serán escuchados ayuntamientos, empresarios, universidades, empresarios y colectivos sociales.

Sin embargo, todavía desconocemos los criterios con los que el Gobierno de España vaya a seleccionar los proyectos que le lleguen de las distintas Comunidades autónomas. Con los precedentes de discriminación hacia la Región de Murcia, como el injusto reparto del Fondo Covid o la resistencia a reformar el modelo de financiación autonómica, tenemos serias suspicacias sobre los criterios a los que se va a atener el Ejecutivo central.

Es de suma importancia que se fijen unos criterios de reparto justos y transparentes para evitar una España a dos velocidades, algo que sería atroz para nuestra recuperación como país después del tsunami económico y social que está suponiendo el coronavirus. Además, sería una oportunidad perdida imperdonable, que perjudicaría notablemente a la Región y a los ciudadanos de esta tierra, y que supondría una brecha insalvable en la recuperación económica y social de la Región respecto de otras regiones nacionales y europeas.

Desde luego, nos preocupa, y mucho, que la coordinación y el reparto de esos fondos se haga desde una oficina creada ´ad hoc´ en Moncloa por el Gabinete del presidente del Gobierno. Porque cada vez que el Ejecutivo Sánchez-Iglesias ha llevado a cabo un reparto unilateral de fondos estatal, la Región de Murcia ha salido perjudicada. Mucho nos tememos que, de nuevo, el criterio se vaya a basar en intereses partidistas o en contraprestaciones a determinados socios por su apoyo a los Presupuestos Generales del Estado y el mantenimiento de Sánchez en el poder.

De ahí que el presidente López Miras haya anunciado que pedirá el amparo de las instituciones europeas para que sea un organismo independiente el que gestione y garantice que los fondos de la UE lleguen a todas las regiones por igual. Porque si depende de PSOE y Podemos, la Región volverá a ser maltratada, y a los hechos cabe remitirse.

La Unión Europea ha repartido los fondos a los distintos países en virtud de tres criterios: población, PIB y desempleo, de tal manera que España ha sido el segundo país de la UE al que más dinero se le ha asignado. Pues bien, solo pedimos que el Gobierno central utilice la misma fórmula objetiva y justa para repartir esos fondos a las Comunidades Autónomas, basándose también en el PIB, población y desempleo, de tal manera que a la Región de Murcia deberían llegar en torno a 2.400 millones de euros.

Por todo ello, reivindicamos criterios objetivos para el reparto de los fondos europeos de recuperación, y que, al igual que en otros países de nuestro entorno, sea un organismo independiente el que decida y gestione.

No permitamos que la culminación de los proyectos estratégicos de nuestra Región, su desarrollo y su futuro, queden también en manos de Rufián y Otegui. No dejemos pasar esta gran oportunidad.