FERRMED, la Asociación Valenciana de Empresarios AVE, así como la Confederación Regional de Empresarios de Murcia CROEM, entre otras organizaciones, vienen reafirmando la necesidad de que el corredor ferroviario del Mediterráneo cuente con doble plataforma desde la frontera hasta Algeciras, y poner en valor todos los puertos de la fachada mediterránea, conectándolos a su vez con el centro y norte peninsular.

El Corredor Ferroviario del Mediterráneo para las mercancías sigue hoy parado en Monforte, y como ha reiterado el mundo empresarial, es preciso que cuente con doble plataforma en todo su recorrido, por ello es necesaria y urgente su continuidad hacia Murcia, en paralelo a la A-7 y Andalucía, como han reiterado los empresarios y como recoge el mapa del Fomento.

Al llegar al norte de Santomera, bifurcarse hacia Cartagena en paralelo a la nueva autovía RM-1, conectando con el actual corredor ferroviario que debe quedar para las mercancías, llegar al puerto de Escombreras, al nuevo puerto de El Gorguel y la ZAL portuaria de Los Camachos. El corredor continua paralelo a la A-7 y a su variante norte para conectar con el corredor ferroviario con Albacete y seguir hacia Lorca y Andalucía.

De no modificarse los planes actuales del Ministerio, la situación de la Región de Murcia quedaría muy perjudicada frente a las regiones de su entorno, dado que solamente circularían sin dificultad las mercancías entre Monforte y la frontera francesa, puesto que la línea de AVE que se está construyendo desde Monforte hasta Murcia adolece de capacidad suficiente para que por ella circulen los trenes AVE, cercanías regionales, mercancías y cualquier otro tipo de tren; hay que recordar la intensidad de tráfico que tiene esta línea de cercanías entre Alicante y Murcia.

Además, hay un problema añadido muy importante para las mercancías, pues entre Murcia y Orihuela la línea cruza por encima de la conducción del trasvase Tajo-Segura con unas rampas teóricas de veinticinco milésimas, el doble exactamente de lo prescrito por la Comisión Europea para las nuevas líneas de mercancías, puesto que encarece y retarda el tráfico de las mismas.

Por estos motivos, tanto FERRMED, como la Asociación Valenciana de Empresarios, en su página web «Quiero Corredor» exigen permanentemente al Ministerio que se haga una nueva línea exclusiva para mercancías desde Monforte hasta Murcia. La redacción del estudio de esta línea se publicó en el BOE de 8 de noviembre de 2011 sin que nunca llegara a adjudicarse. Desde nuestro punto de vista esta línea debería ir paralela a la A7 para conectar con los corredores de Cartagena, Albacete y continuar hacia Lorca y Andalucía, como han pedido y reiterado los empresarios y los sindicatos.

La realización del Corredor Ferroviario de Mercancías a partir de Monforte en paralelo a la A-7, a la altura de Santomera y en paralelo a la RM-1 conectaría con el actual trazado ferroviario que debe quedar para las mercancías, sin necesidad de hacer el túnel del Cabezo de la Plata. Es la solución idónea y solicitada por todas las entidades políticas, económicas, sociales y Colegios Profesionales, conectando a su llegada a Cartagena con la ZAL de Los Camachos y los puertos de El Gorguel y Escombreras, a la llegada al norte de Murcia se conectaría con la línea mixta con Albacete y continuaría hacia Lorca.

La solución central para el AVE con Cartagena acortaría sensiblemente la distancia entre Murcia y Cartagena y conectaría con el actual aeropuerto de la Región y liberaría la línea del Este que quedaría para las mercancías, lo que supondrá un impulso decisivo al desarrollo ferroviario de la producciones energética e industrial y portuaria, haciendo de la Región una zona logística de primer nivel.

Por este motivo se solicita, también, que esta doble plataforma desde Murcia siga hasta Lorca o Pulpí y desde allí se divida en dos plataformas independientes, una de doble vía iría hacia Almería y la otra pasaría por Baza y Guadix para llegar a Granada, es decir, recuperar la antigua línea de Lorca a Baza cerrada el 1 de enero de 1985, poniendo en valor todos los puertos de la fachada mediterránea, a la vez que una muy importante mejora medioambiental y de capacidad de transporte en todas las producciones del Levante hacia el resto de Europa.