El concejal del Ayuntamiento de Bullas Juan Valera Gea ha fallecido a la edad de 52 años tras una larga enfermedad. 

El edil era, actualmente, el responsable de Obras Públicas, Infraestructuras y Servicios Municipales del municipio, además de teniente de alcalde de la localidad. En la legislatura anterior, además, fue también concejal de Bienestar Animal, Agricultura y Medio Ambiente. 

Natural del barrio de La Cruz de la localidad, dedicó durante años gran parte de su tiempo a dinamizar la vida de su entorno, participando en la asociación vecinal Avebac, de la que fue un pilar fundamental, al igual que del Club Balonmano Bullense, siendo uno de sus pioneros artífices.

La dedicación, esfuerzo y tesón en su trabajo como concejal, han sido indiscutibles. Trabajó con una ejemplar determinación en todo lo que hizo, defendiendo con pasión sus ideas y propuestas para mejorar su pueblo, así como la calidad de vida de sus vecinas y vecinos.

En los últimos tiempos ejerció su papel con total entereza, fuerza, optimismo y, sobre todo, con enormes ganas de continuar trabajando por el municipio, y así lo hizo hasta el último minuto.

Buena persona, humilde, dialogante, esas han sido las palabras más escuchadas a lo largo de estos días por parte de los habitantes de Bullas. Y lo era. Palabras de admiración hacia Juan por parte del resto de sus compañeros de corporación, del equipo de Gobierno del que formaba parte y de la familia socialista de Bullas. Ya no solamente por su papel como concejal, desempeñado con total entrega durante estos años, sino como la gran persona que fue: padre, esposo, hijo, hermano, primo y amigo. 

Juan nos deja un grandísimo legado, plasmado prácticamente en cada rincón del municipio, que ha intentado mejorar con total previsión, eficacia y austeridad. Cada pequeño arreglo ha sido el resultado del diálogo paciente y cercano con los vecinos. Pero nos deja, también, un grandísimo vacío para quienes tuvimos la suerte de conocerlo y de trabajar a su lado. 

Gracias de corazón por enriquecernos con tu singular manera de trabajar. Por habernos permitido gestionar, aprender, reír y crecer contigo. Absoluto orgullo el que sentimos. Descansa en paz, amigo.