Las visitas que está realizando la concejala de Servicios Sociales también están sirviendo para consolidar una nueva comunicación entre Ayuntamiento y centros de mayores para ir solventando todas las incidencias y necesidades que se presentan. Paqui Pérez recuerda que desde el pasado 4 de agosto «hay por primera vez en este Ayuntamiento tres empresas que se han quedado con el mantenimiento de los edificios municipales». Antes, la Concejalía que dirige tenía que actuar a través de contratos menores y de manera no estructurada. «Mis visitas están sirviendo para pedir a las juntas directivas que manden por escrito, a través de los nuevos equipos informáticos que tienen, la solicitud para las reparaciones (la bombilla, la grieta, la gotera...) que requieren, para que exista una trazabilidad y un mejor control».

En este momento, la principal incidencia con la que está trabajando el Consistorio está localizada en el centro de Santa Eulalia, cerrado actualmente tras una obras de reformas realizadas por la comunidad de propietarios del inmueble. Según informa la edil, cuando se iba a hacer la entrega de obra , «han salido unas aguas subterráneas, y estamos viendo de dónde proceden».

Además, hay tres centros, el de Cabezo de Torres, Jerónimo y Avileses y el de La Ñora, que todavía no tienen habilitada la cantina por unos trabajos que se licitaron en la época de Ballesta y que resultaron ser «una chapuza», afirma Pérez.