Todos los concejales del Ayuntamiento de Murcia así como su personal eventual de confianza se congelarán el sueldo el año que viene tras la votación unánime a favor de los cinco grupos políticos con representación en La Glorieta. De esta manera, no se aplicarán la subida de sueldo del 0,9% que ha planteado el Gobierno de España para todos los funcionarios el año que viene, y la diferencia, 25.000 euros, según el Consistorio, será donada al Banco de Alimentos para que continúe con su labor de atención social a los colectivos y personas que han sido más golpeadas por la crisis sanitaria del coronavirus.

El alcalde, José Ballesta, aseguró que esta decisión se adopta «desde la responsabilidad» y afectará también a las dietas por asistencias a plenos y comisiones, que no se incrementarán. El resto de empleados municipales no se van a ver afectados por esta congelación salarial, aseguraron desde el Ayuntamiento.

En este sentido, el regidor murciano destacó el «sentido institucional y alto contenido moral y cívico» de los partidos al aceptar de forma unánime este acuerdo en una situación de especial dificultad generada por la covid, y calificó el gesto como una «decisión corporativa».

Por su parte, José Antonio Serrano, portavoz del Grupo Municipal Socialista, advirtió que esta decisión «no deja de ser un gesto», ya que al final «el dinero que se puede ahorrar el Ayuntamiento de Murcia con un presupuesto de alrededor de 400 millones de euros es tan solo de 27.000 euros».

En este sentido, Serrano señaló que «hay que seguir recortando en gastos superfluos. Nosotros vamos a revisar el Presupuesto 2020 para señalar aquellas partidas que se pueden reducir o limitar con el fin de tener los fondos necesarios para destinar a los colectivos y familias que peor lo están pasando», porque «estamos seguros de que hay mucho margen para seguir recortando», añadió.

Igualmente desde Podemos, su portavoz, Ginés Ruiz, hizo hincapié en que la donación al Banco de Alimentos «no puede tapar la necesidad de mejorar, de manera urgente, los servicios sociales municipales». «Un municipio justo no se puede construir con caridad, no podemos depender de las oenegés para garantizar la igualdad de los murcianos», resaltó Ruiz, quien también solicitó la necesidad de «dotar de mayor presupuesto a los servicios sociales, para que alcancen a todas las personas vulnerables y garanticen que todos los vecinos y vecinas de Murcia sean iguales y tengan las mismas oportunidades».

La medida tomada ayer se une a la batería de actuaciones que está implementando el Ayuntamiento para paliar las consecuencias de la covid. «El Plan de Reactivación Económica y Social es la herramienta que articula el grueso de las medidas que se están adoptando en Murcia para ayudar a los sectores que peor lo están pasando», según el Consistorio. Dentro de las actuaciones están la inversión de 2,3 millones para abonar ayudas sociales extraordinarias, la supresión de la tasa por instalar terrazas para los hosteleros durante el primer semestre de 2021 y la reducción del 50% de la tasa aplicable a los mercadillos semanales durante el primer cuatrimestre de 2021, entre otros.