La fundación Jesús Abandonado ha ayudado a 139 personas en riesgo de exclusión social a encontrar un empleo, principalmente en el sector servicios y en el agrario, a través de los cursos con certificación profesional que se impartieron el pasado año, según ha informado su director, Daniel López, durante la presentación de la memoria anual de 2017.

«Estas cifras son muy similares a las de 2016, se mantienen estables con un ligero aumento, y aunque es cierto que están muy alejadas de los peores años de crisis económica, tampoco debemos olvidar que la recuperación económica que estamos viendo no está llegando a todo el mundo», ha señalado López. En total, la fundación atendió a más de 4.000 personas, un 10 por ciento más que el año anterior, de las cuales 1.771 recibieron alojamiento en el marco del programa 'Housing First', cuyo objetivo es concienciar a las personas sin hogar que pernoctan en la vía pública de la necesidad de vivir en sociedad para, después, proporcionarles un hogar.

Además, la media de ocupación del centro de acogida de la fundación fue del 93 por ciento a lo largo de todo el pasado año, ha explicado López, quien ha agregado que se ha atendido a 172 personas sin techo el pasado ejercicio, de las cuales 142 fueron derivadas a distintos centros de la fundación.

Con respecto al comedor social, en 2017 dieron 304.070 servicios de desayunos, comidas y cenas, ha dicho López, que ha añadido que la fundación también ofreció 43.472 servicios de higiene, que incluyen duchas, ropa, calzado o lavandería. En el centro de día, que permanece abierto todo el año, se atendió a 126 personas, que participaron en 379 actividades centradas en intentar alejarlas de la calle y que «se reconozcan como personas y luchen por su autonomía», ha dicho.

Para lograr ayudar a estas personas cuentan con el apoyo de 76 profesionales contratados, como psicólogos o psiquiatras, y más de 400 voluntarios para ofrecer servicios de odontología, podología, ginecología o peluquería.

El presupuesto con el que contaron fue de 3.701.637 euros, una media de 10.000 euros más diarios que en el año 2016.