Las obras de modificación del enlace de las autovías A-30 entre Cartagena y Madrid y A-7 en dirección a Alicante y a Andalucía, a su paso por Murcia, que comenzaron este mismo verano, han permitido poner ya en servicio el tercer carril de la A-30, entre los puntos kilométricos 133 y 135.

Además, ya se han ejecutado también los 'pilotes' de los dos nuevos pasos superiores del nuevo ramal -que enlazará con el ramal proveniente de Alicante y destino hacia Albacete y Madrid- y también se encuentran finalizadas las ampliaciones de las obras de drenaje previstas.

De manera complementaria, actualmente, se está trabajando aún en las ampliaciones de los diferentes ramales de enlace, y queda pendiente la ejecución de los nuevos tableros de puentes sobre Juan de Borbón y la A-7 - autovía que contará con un carril más en el tramo que transcurre entre los enlaces de Fortuna y Orihuela (13 km), y entre los enlaces de Alcantarilla y Alhama (20 km)-, que mejorarán la circulación de los vehículos provenientes de Andalucía, al incorporarse a la A-30 en dirección a Madrid.

A buen ritmo

Según fuentes del ministerio de Fomento, del que dependen directamente estos trabajos licitados en mayo, «las obras van a buen ritmo y dentro del plazo previsto», aunque prefieren no adelantar nada sobre su fecha de finalización, sobre la que se informará de forma concreta al producirse, para evitar de esta forma confusiones que puedan afectar al tráfico. El importe total destinado por el Ministerio a esta remodelación ha sido de 3,8 millones de euros.

Ambas autovías ampliarán de esta forma hasta 44 kilómetros de longitud con los terceros carriles, que se complementarán con la Variante Noroeste de Murcia, dividida en los Arcos Norte y Noroeste.

Por otra parte, los trabajos también incluyen la prolongación del carril adicional para circulación de vehículos lentos en rampa en la autovía A-30 en dirección a Molina, Cieza, Albacete y Madrid, según se publicó en su momento en el BOE.

La mejora de la circulación en un punto con alta densidad de tráfico, donde concluyen los vehículos que entran a la ciudad procedentes tanto de Albacete como de Alicante, también será posible gracias a la realización de estas obras en carretera. Igualmente, aliviarán el nudo de los centros comerciales Thader y Nueva Condomina e Ikea, unos puntos que presentan problemas de fluidez en el tráfico en horas puntas y en operaciones de tráfico de vacaciones desde que abrieran las grandes superficies, hace diez años.

De igual manera, las actuaciones implican la modificación del ramal procedente de Alicante con destino a Madrid, y, una vez realizada la incorporación a la calzada de la autovía de Albacete, se mantendrán los cuatro carriles, dos existentes y dos provenientes del ramal principal en una longitud de 100 metros para, a continuación, incorporar el tráfico del cuarto carril hacia los carriles interiores.

Por último, las obras prolongarán la carretera en un kilómetro y medio de recorrido, aproximadamente, hasta el punto 133 de la autovía, para a continuación volver a realizar una transición que elimine el carril interior ganado a la mediana actual, finalizando en torno al punto kilométrico 132+550 de la autovía de Albacete.

Los trabajos de remodelación aliviarán de este modo el tráfico diario de hasta 125.000 vehículos en el principal cruce de autovías de la Región.