Las multas y sanciones que imponen las administraciones a los ciudadanos es una fuente de ingresos importante, sobre todo en los ayuntamientos. En el caso del de Murcia ya se sabe la cantidad que tiene previsto recaudar para el próximo año en este capítulo. El Presupuesto Municipal para 2016 contempla 15,5 millones en este concepto, lo que supone un aumento de casi medio millón de euros con respecto a 2015.

Para este año, el ayuntamiento de Murcia, a través de la concejalía de Hacienda, había previsto ingresar en multas y sanciones 14,9 millones de euros, una cantidad inferior a la recogida para el próximo ejercicio. Según consta en el borrador de los Presupuestos Municipales, que ya ha sido entregado a la oposición para que aporte sugerencias de cara al pleno extraordinario de diciembre en el que se aprobarán, la mayor cuantía para 2016 se recoge en el apartado de multas de tráfico. Concretamente, especifica que las arcas locales pueden llegar a los 7,5 millones -la mitad del total presupuestado- por las infracciones que cometan los conductores.

El consistorio es consciente de la importancia que para los conductores tienen las sanciones de tráfico y por eso ha querido en todo momento facilitar su pago o la presentación de recursos para que se anule la multa o se modifique su cuantía. De hecho, la página web del Ayuntamiento (www.murcia.es) en su apartado Carpeta del Ciudadano facilita información y consultas sobre las sanciones a la Ordenanza de Circulación. Además, en esa misma página se pueden descargar los formularios para hacer una reclamación sobre sanciones y otros que permiten identificar al conductor del vehículo sancionado por si la infracción la hubiera cometido una persona distinta al titular del vehículo en cuestión.

En sanciones urbanísticas, es decir por construcciones sin licencia e ilegales, la concejalía de Hacienda también ha previsto un buen pellizco: 3,2 millones de euros, la misma cantidad que para este ejercicio. Sin embargo, donde los Presupuestos Municipales recogen un aumento importante en la recaudación de multas es en el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana, más conocido como Impuesto de Plusvalías.

Este tributo se debe abonar a las arcas municipales cuando se produce una transmisión de la propiedad de un inmueble o de la constitución o transmisión de derechos reales sobre inmuebles (por ejemplo un usufructo). En el caso de venta de una propiedad (piso, plaza de aparcamiento, trastero, tienda, casa, etc.) tiene que pagar el impuesto la persona, empresa o entidad que vende, por el incremento del valor que ha experimentado el terreno mientras ha sido propietaria. Si el transmisor o vendedor es una persona física no residente en España, el obligado al pago será el adquirente. En el caso de herencia o donación, es el nuevo propietario quien tiene que pagar el impuesto. El pago se tiene que realizar en el plazo de 30 días hábiles a partir de la fecha de transmisión.

Las arcas municipales prevén ingresar en sanciones por el impago de Plusvalías 1,2 millones frente a los 700.000 recogidos en los presupuestos de 2015, lo que supone un aumento de casi el 100%. A lo largo de este ejercicio, el Ayuntamiento ha recaudado ya un millón de euros en multas por este concepto, debido a que se ha extremado la vigilancia tras un acuerdo con el colegio profesional de Notarios.