Tres promotoras de Murcia están negociando la compra del edificio de Ronda de Levante conocido como Bloques de Ayuso y el acuerdo podría cerrarse la semana próxima, según han comunicado las partes al abogado de 12 de los 14 inquilinos que aún residen y mantienen abiertos negocios en el inmueble, que ha sido declarado en ruina económica por la Gerencia de Urbanismo.

El letrado Antonio Pagán confirmó ayer que el final del culebrón está próximo, ya que con la entrada de nuevos promotores se allanaría el camino para llegar a un hipotético acuerdo para la salida de estos últimos supervivientes, que se resisten a dejar sus casas y sus locales sin que se les reconozcan sus derechos como arrendatarios. "Los propietarios están pendientes de firmar la venta y replanteándose el derecho de tanteo de mis clientes, de modo que podamos llegar a un acuerdo lo antes posible", explicó.

La lucha de los vecinos se remonta a 2007, cuando el desprendimiento de cornisas y cubiertas por el mal estado de conservación de dos de los inmuebles, construidos en 1953, obligó al Ayuntamiento a adoptar medidas de oficio para garantizar su seguridad. La Gerencia de Urbanismo encargó un proyecto de rehabilitación de 450.000 euros.

Además, los servicios técnicos de la Gerencia elaboraron un informe que determinó la ruina económica para estos edificios, pues harían falta 1,5 millones de euros para rehabilitarlos, que es prácticamente el valor actual del inmueble, en torno a 1,6 millones.

Unos meses después los inquilinos empezaron a recibir cartas de los propietarios, los hermanos Antonio e Isabel Ayuso, notificándoles la situación de sus contratos y ofreciéndoles varias alternativas: indemnizar a los arrendatarios que quisieran, realojarlos y pagarles la diferencia del nuevo alquiler -en caso de aquellos que tuvieran contratos anteriores a 1985- y realojar, con mediación de Bienestar Social, a los mayores en residencias. Los dueños de los edificios, que por entonces negociaban la venta de los mismos ante el alto costo de la rehabilitación, no lograron convencer a una quincena de arrendatarios, que no pretenden mudarse.

En estos últimos dos años se han sucedido los recursos y demandas para impedir el desahucio y han denunciado a los dueños por moobing inmobiliario. El abogado de 12 de los afectados insiste en que tienen derecho de compra y tanteo de su vivienda y sus tiendas antes que cualquier promotor y exigen compensaciones. "Los dueños querían vender y echarlos a la calle pagándoles la mudanza, pero mis clientes reclaman sólo sus derechos", asevera el letrado.