En el Centro de Desarrollo Local, CDL, se reunían este jueves vecinos de las diputaciones de Campillo, Torrecilla y Almendricos con técnicos del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias, Adif, para darles a conocer el proyecto del Corredor Mediterráneo a su paso por estas pedanía. Los vecinos acudían con la firme intención de reclamar un viaducto similar al que se construye en la diputación de Tercia que permita salvar las ramblas que en 2012 causaron el desplazamiento de más de veinte metros de las vías del ferrocarril a su paso por Torrecilla.

Los afectados se mostraban muy preocupados por los pasos de agua que se han marcado en el proyecto y que creen insuficientes para hacer frente a las avenidas que registran ramblas como la de Torrecilla. “Han dejado pasos de cuatro metros por dos, pero nosotros creemos que no son suficientes. Y pedimos un viaducto de 2,6 kilómetros”, afirmaba en declaraciones a LA OPINIÓN Cayetano Padilla Ruiz, presidente de la Asociación de Vecinos de Torrecilla.

Esta petición vecinal fue calificada de ‘inviable’ por tratarse de una zona sísmica, algo que no convence a los afectados. “Nos dijeron que el pilotaje podría dañarse con los movimientos sísmicos, pero sin embargo vemos cómo en Tercia se está haciendo. Ellos tienen un problema que es la alta densidad de tráfico y nosotros las avenidas torrenciales que se pueden producir”, explicaba Padilla Ruiz.

Los afectados son unos 7.000 vecinos de Torrecilla y Campillo. “Directa o indirectamente somos en torno a ese número, pero unas 2.500 familias las que tienen intereses”. Los vecinos acudían a la reunión con un amplio reportaje fotográfico en el que se podía ver las repercusiones que tuvieron en la zona las últimas inundaciones. “Fueron las del 28 de septiembre de 2012. Allí la vía la reventó el agua. Se llevó algo más de un kilómetro”, detallaba el presidente de los vecinos de Torrecilla.

El agua, explicaba, se embalsó hasta alcanzar más de metro y medio de altura. “Cuando reventó se lo llevó todo por delante. En aquellas fechas nos dijeron que no nos preocupásemos que cuando hicieran las obras del Ave iban a incluirse pasos suficientes. Entendemos que llegaremos a un acuerdo”.

Al encuentro asistían el alcalde, Diego José Mateos Molina, y la concejal de Fomento, Isabel Casalduero. Mateos señalaba que en la reunión de trabajo “los vecinos han podido escuchar cuestiones que les afectan y preocupan como son las relativas a los pasos de agua de las ramblas y de los cauces en las pedanías de Campillo y Cazalla, así como la ejecución en Almendricos, donde se va a llevar a cabo un desplazamiento del trazado original y ver cómo quedará el entorno y su solución definitiva”.

En unas semanas, anunciaba, se celebrará otra reunión “sobre el terreno para ver por dónde discurre dicho trazado, como ya sucedió con los vecinos de Tercia, y que se pueda realizar la adaptación necesaria de esta infraestructura tan fundamental y que está para unir, no para separar”. Por último, insistía en que “nuestra intención es que, dentro del presupuesto que haya, se lleven a cabo las adaptaciones del proyecto que hagan que este vaya mejorando, con las menores afecciones posibles para los vecinos”.

El encuentro de trabajo fue un compromiso del delegado del Gobierno, José Vélez, con los vecinos de Campillo, Torrecilla y Almendricos. Una representación vecinal acudió días pasados a la visita que realizó Vélez a las obras del Ave a su paso por la diputación de Tercia. Allí, le hicieron partícipe de sus preocupaciones en cuanto a los pasos de agua. El delegado del Gobierno se comprometió a que de inmediato se llevaría a cabo una reunión para que los técnicos de Adif les explicaran el proyecto y atendieran sus reivindicaciones, como ha ocurrido este jueves.