Las empresas del sector del mueble y la madera de Yecla están sufriendo las consecuencias de la alerta mundial que se ha activado por el coronavirus. Con las fronteras cerradas a la exportación y la importación, el sector no solo tiene un importante mercado paralizado, con las mercancías retenidas por el momento, sino que no puede importar las materias primas para la producción de muebles. El gigante asiático proporciona a la industria del mueble y el descanso las telas, mecanismos y otros componentes para la elaboración de los productos.

El presidente de la Asociación Nacional de Industriales y Exportadores de muebles, el yeclano Juan Carlos Muñoz, confirma los problemas de abastecimiento que están empezando a surgir en importantes empresas del sector y asegura que "si no se soluciona rápido, el problema podría ser mucho más grande". Hay empresas que recibían pedidos de China todos los días y ahora tienen el suministro parado.

El coronavirus también ha suspendido la agenda comercial de las empresas del sector. Una importante feria de muebles que se iba a celebrar en China a finales de marzo ha sido suspendida, y otras como la de Milán están tomando medidas para que el coronavirus afecte lo menos posible al desarrollo del certamen.

El vino también sufre las consecuencias

El sector del vino también se está resintiendo con el coronavirus. Al Brexit y los aranceles impuestos por la administración Trump se suma ahora esta nueva problemática que ha retenido mercancía enviada por las bodegas yeclanas en la frontera: "no solo estamos teniendo problemas con China sino también con países cercanos", asegura Antonio Candela, empresario del mundo vitivinícola, quien apunta que "existe cierta psicosis que afecta a productos que no son de primera necesidad, como el vino". Bodegas Barahonda, al igual que otras bodegas del municipio, tienen mercancía retenida en los navieros a la espera de que se abran los puertos donde descargar la mercancía.