El grupo municipal de Izquierda Unida Los Verdes de Mula mantiene su rechazo al convenio suscrito por el Ayuntamiento de Mula y el grupo Cobra Concesiones S.L. para la construcción de una nueva planta solar fotovoltaica en el paraje de la Retamosa en Fuente Librilla. Izquierda Unida votaba en contra durante la presentación del convenio al Pleno del Ayuntamiento.

La formación destaca que el convenio es similar al actualmente vigente, firmado en 2015, «que ya supuso dejar de ingresar 8 millones de euros por el ICIO», afirman. En este mismo sentido explican que en convenio anterior no es aplicable en este nuevo caso porque «Cobra Concesiones ha cambiado las circunstancias originariamente previstas para llevar a cabo la explotación de la planta, dado que resultó beneficiaria del régimen retributivo específico en una de las subastas renovables de 2017 llevadas a cabo por el Estado, es decir, no va a explotar la planta en régimen ordinario como reza en el mismo».

Así explican que el Estado garantiza a los productores una rentabilidad superior al siete por ciento mediante el pago de una prima sobre el precio del Kw obtenido en el mercado libre, para lo cual ya ha considerado en sus cálculos de costes el pago de tributos locales. «Solo retorciendo la legislación actual se puede justificar legalmente la práctica de las bonificaciones de tributo locales que estamos denunciando», añaden.

Para IU, «lo que se está haciendo se podría calificar casi de fraude al Ayuntamiento, al Estado y al resto de empresas que tienen placas solares, por lo que Izquierda Unida Los Verdes va a comunicar a la Comisión Nacional del Mercado y la Competencia (CNMC) -organismo encargado de gestionar las ayudas que se da a los productores de energías renovables- las ayudas públicas que está dando el Ayuntamiento de Mula a los propietarios de la planta por considerarlas incompatibles con el régimen retributivo específico del que ya se benefician a cargo del Sistema Eléctrico Nacional».

Es más, IU denuncia que el negocio sigue siendo, redondo para Cobra, «ya que con la primera planta -aún en construcción- se ha embolsado un beneficio de 55 millones de euros al vender la planta a un grupo de inversores extranjero vendiendo nuestro sol a los canadienses». Desde la formación afirman además que los puestos de trabajo que generan este tipo de empresas son precarios, temporales y nada estables. «Pensamos que una recaudación justa de impuestos nos llevaría a tener posibilidades de generar más suelo industrial, potenciar la llegada de empresas que se instalen o un plan de comercio local, medidas todas que nos llevarían a un empleo de más calidad y duradero», comentan.