La tragedia ferroviaria que costó la vida a 12 ecuatorianos al ser arrollada la furgoneta en la que viajaban por un tren de cercanías en un paso a nivel en La Torrecilla cumplía ayer 18 años. La asociación 'Nuevos lorquinos' recordó a los fallecidos con un homenaje, en el que hubo una ofrenda de flores en el mismo lugar del accidente, así como la suelta de 12 globos como recuerdo y homenaje a las víctimas. El presidente de la asociación, Mario Aguilar, señaló que aquel triste suceso ocurrido el 3 de enero de 2001 sirvió para tomar conciencia de la necesidad de regular la inmigración y legalizar a quienes trabajaban en la agricultura.