El pacto de Gobierno de Blanca en la cuerda floja tras el cese de un pedáneo

La regidora de Blanca, Esther Hortelano (PP), ha cesado al alcalde pedáneo del barrio de la Estación, Ernesto Ortega, después de que éste, y según señala un decreto de Alcaldía con fecha del 24 de noviembre, «demandara al Consistorio remuneración económica y ante la imposibilidad de asignarle la misma de conformidad con la legalidad vigente». Por su parte, el cesado afirma que en el pacto de Gobierno entre el Partido Popular y Blanca Puede se incluía una remuneración mensual de 200 euros que, según indica, «hasta la fecha, y once meses después de tomar posesión el nuevo equipo de Gobierno, no se ha cumplido».

La alcaldesa ha detallado que «se trata de un cargo honorífico que no lleva consigo retribución, por lo que no podemos pagarle legalmente. No podemos saltarnos la ley. Él nos pide una retribución que no podemos dársela, y no porque no queramos y se lo merezca, que pensamos que se lo merece, sino porque legalmente no podemos hacerlo», explicó Hortelano, quien además reiteró que «la única salida es proceder al cese en sus funciones». Además, el Equipo de Gobierno ha agradecido «el trabajo desempeñado en sus tareas desde su nombramiento hace ya once meses, tras la toma de posesión del nuevo equipo de Gobierno de coalición entre el PP y Blanca Puede. Por otra parte, Esther Hortelano ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad a los vecinos de La Estación, asegurando que, hasta la fecha, Ernesto Ortega «era el trasmisor de los problemas de los vecinos al equipo de Gobierno y, ahora, serán los concejales los que se encarguen directamente de abordar los problemas con más presencia en el barrio".

«No he cobrado ni un duro»

«No he cobrado ni un duro»Ernesto Ortega, que engrosaba las listas de Blanca Puede como número tres en las pasadas elecciones municipales, manifestó ayer su sorpresa tras el decreto de la Alcaldía y declaró que en el pacto de gobierno del PP y Blanca Puede «se aprobó que yo cobrara 200 euros todos los meses, y no he cobrado ni un duro hasta el momento».

Además, y según el pedáneo, «la alcaldesa ni si quiera me ha preguntado si quiero seguir trabajando sin cobrar, y parece que ahora voy a quedar yo como un pesetero».

Ortega asegura no estar dispuesto a «consentir» este último calificativo y no descarta «consultar judicialmente este desagradable asunto» por si lo lleva a los tribunales.