La Guardia Civil ha detenido en Granada a un vecino de Miño (A Coruña) de 41 años reclamado por tres comisarías y seis juzgados tras darse a la fuga cuando los agentes le dieron el alto en la localidad granadina de Pinos Puente, en una persecución que se llevó a cabo por tierra y aire.

La operación se inició cuando el detenido, al que constan numerosos antecedentes policiales por estafa, se dio a la fuga poniendo en peligro la vida de los agentes, según ha informado la Guardia Civil en un comunicado.

La patrulla alertó de la huida de este vehículo que, según comprobó, había sido sustraído en la localidad murciana de Alcantarilla.

La Guardia Civil estableció en la zona un dispositivo integrado por las patrullas de Seguridad Ciudadana y de Tráfico, a las que se unió el helicóptero del instituto armado de Granada, que localizó el coche en la carretera que une las localidades de Íllora y Zujaira-Pinos Puente.

Una vez localizado se inició una persecución por más de diez kilómetros de la A-336 que finalizó en la Cuesta de Velillos, en el municipio de Pinos Puente, donde el coche quedó inmovilizado en un socavón del camino.

Hasta entonces burló cuatro puntos de interceptación en donde las patrullas intentaron darle el alto y donde los guardias civiles tuvieron que saltar a la cuneta para no ser atropellados.

Una vez que el coche quedó inmovilizado el detenido intentó huir y esconderse entre la maleza de un campo cercano, pero fue visto por los agentes que tripulaban el helicóptero, por lo que finalmente optó por entregarse.

Al detenido se les imputan los delitos de robo de vehículos y contra la seguridad vial por conducción temeraria.