Peugeot 308 SW GT LINE 2.0 BlueHDI 150 cv, dinámica, practicidad y eficiencia

La actual generación de la familia 308 salió al mercado hace cinco años, pero no hace mucho que se actualizó con retoques de aspecto, dotación, gama y mecánicas. Con la vigencia renovada nos llega el nuevo 308 en su versión familiar SW, un formato de apariencia agraciada que mantiene la buena dinámica de la versión de cinco puertas, aumentando enormemente su capacidad de carga: 470 litros para el modelo de base y 610 litros para nuestro protagonista SW.

Mejoras en todos los frentes

Su puesta al día bien merece un análisis. Para empezar, su imagen se ha modernizado principalmente con un nuevo frontal (ópticas, parrilla y capó), que se completa con un interior de ciertos detalles más trabajados, como la instrumentación y, lo más notorio, la nueva pantalla de casi 10 pulgadas que ha mejorado su manejo y resolución. En lo que respecta a la gama mecánica, el Peugeot 308 SW queda configurado con cuatro niveles diésel y otros tantos en gasolina. Los primeros son los BlueHDi 1,6 l. con 100 CV, 1,5 l. con 130 CV (que sustituye al 1,6 l. de 120 CV) y los 2,0 l de 150 y 180 CV. Los gasolina PureTech prescinden del inicio de gama 1,2 l. de 82 CV y de uno de los más potentes de 250 CV para conformar la gama actual con el 1,2 l. de 110 y 130 CV, y 1,6 l. de 205 y 272 CV. Otra novedad importante es que se añade un cambio automático de ocho relaciones al diésel tope de gama, mientras que se mantiene el otro automático de seis marchas para el PureTech de 130 CV y los BlueHDi de 130 y 150 CV. Nosotros hemos optado para esta ocasión por una unidad dotada del vistoso acabado GT Line, que acota las posibilidades de configuración al BlueHDi de 150 CV y al PureTech de 130 CV, quedándonos con la primera opción de gasóleo por el poder que da a la hoja de prestaciones y su cuidado del consumo.

Rodador nato y confortable

Pese a su militancia en el segmento de compactos, el 308 SW resulta cómodo gracias a las cotas interiores que permiten una carrocería de 4,58 metros de largo con una distancia entre ejes de 2,73 metros. Habitabilidad bien resuelta, incluso para tres personas detrás, destaca además por los buenos materiales empleados, que han ganado calidad a raiz de la actualización mencionada. El tecnológico puesto de mandos ´i-cockpit´ se consulta por encima del volante, cuyo diámetro, al igual que ocurre con otros modelos de la firma, es más reducido y manejable. El sistema multimedia, además de mejorar la apariencia y operativa de la pantalla, ofrece más posibilidades de navegación gracias a ´Tomtom Traffic´, que optimiza los tiempos de desplazamiento al ofrecer información sobre la situación del tráfico, la climatología, las gasolineras y los aparcamientos disponibles en tiempo real. La función ´mirror screen´ permite ampliar la conectividad con nuestros teléfonos móviles inteligentes. Para terminar con su interior, no podemos pasar por alto otra de sus bazas: el maletero. Con un volumen máximo de 610 litros de capacidad hasta la cortinilla que lo cubre, el 308 SW carga con todo el equipaje de sus ocupantes, operación que se ve facilitada por la baja altura del hueco que deja el portón al abrirse.

En marcha, el 308 SW BlueHDi 150 CV es un rutero excepcional. Algo más refinado que sus hermanos de 100 y 130 CV, nuestro ´dos litros´ se muestra además poco sediento incluso practicando una conducción viva. De generosa entrega de potencia, se nos antoja suficiente para ir incluso con mucha carga, por lo que dejamos la opción más decidida de 180 CV para quien desee algo más de empuje, aunque esa variante conlleve otro acabado de pleiteamiento más deportivo y quizá un poco menos cómodo que este BlueHdi de 150 CV. Aun así la dinámica de nuestro protagonista nos parece calcada a la del cinco puertas, contando con una zaga bien distinta y una suspensión trasera que está preparada para soportar mayor peso. Hemos dejado para otra ocasión la posibilidad del cambio automático de seis relaciones y convertidor de par en favor de la efectiva caja manual de seis relaciones, sencilla de manejo y precisa en su tacto. El buen par del motor hace que tengamos que recurrir lo justo al cambio en recuperaciones y muy mal se tiene que dar un repecho de autopista para que bajemos de la sexta marcha. Como colofón, el gasto parco en cualquier escenario nos ha dejado todavía mejor sabor de boca: 3,9 l./100 km (4,3 l./100 km si es automático), que suben un poco más pero sin pasar de los 6,5 litros por cada 100 km. Buenas cifras teniendo en cuenta que, con el caos de tráfico de esta época de rebajas, nos hemos comido unos cuantos atascos en las inmediaciones de nuestra querida ciudad de Murcia.

Mucha seguridad y dotación

El Peugeot 308 SW cuenta con un nuevo y optimizado programador de velocidad, que puede detener el coche completamente si el vehículo precedente lo hace. Además se puede usar conjuntamente con el lector de señales de limitación de velocidad. Hay otro sistema que mantiene el coche dentro del carril actuando sobre la dirección, pero necesita que el conductor no pierda el contacto con el volante demasiados segundos. Otros dispositivos interesantes son el avisador de vehículos en los ángulos muertos, que puede incluso evitar una colisión si el conductor no se ha dado cuenta, o el sistema de aparcamiento asistido y la cámara trasera de visión de 180 grados.

Al contar nuestro 308 SW con el acabado GT Line, el resto de equipamiento es muy completo. Así encontramos los sensores de lluvia y luces, los faros de Led para todas las funciones, las llantas de 17 pulgadas, el climatizador doble, la navegación con acceso a internet y el volante deportivo en cuero, entre otros elementos.

El precio del nuevo Peugeot 308 SW 2.0 150 CV BlueHDi GT Line es de 25.900 euros con caja manual, 27.400 euros si monta el cambio automático EAT6.