La actual generación del compacto galo llegó al mercado a finales de 2013. Puede parecer todo un veterano respecto a algunos modelos de la competencia que se han ido renovando, pero lo cierto es que el 308 es un producto muy bueno y sobre todo equilibrado. Así, la mencionada veteranía le ha servido para ir sumando nuevas motorizaciones y detalles de equipamiento con el paso del tiempo. Además, sus líneas clásicas e intemporales no le hacen perder vigencia, pues eso lo ha sabido hacer siempre bien la marca, diseños que soportan bien los años.

El Peugeot 308 mide 4,25 metros de largo, con lo que se sitúa en mitad de uno de los segmentos más poblados y difíciles del mercado, junto con el de los ´SUV´, que tan de moda está. Sin duda es una buena compra por su calidad interior, a destacar para una marca generalista, motores muy afinados y dotación de base más que suficiente. Todo esto forma un combo muy llamativo por su relación precio/producto.

Disponible con carrocerías de cinco puertas y familiar, su habitáculo resulta espacioso para el tamaño exterior y, atención al maletero, porque es casi de berlina de tres volúmenes con sus 398 litros (el familiar hace honor a su categoría, con los 556 litros de carga).

Si los detalles hasta ahora mencionados nos hacen pensar que es un modelo muy bien planteado, echar un vistazo a su catálogo mecánico nos lo confirma aún más, puesto que es variado y eficiente. Así se puede adquirir con seis motores de gasolina (un bloque de 1,2 litros y tres cilindros con 82, 110 y 130 CV y otro de cuatro cilindros y 1,6 litros con 205, 250 y 272 CV) y cinco de gasóleo (los 1,6 litros de 100 y 120 CV, de éste último hay otra versión de consumo aún más reducido llamada MBC, y el otro bloque de 2.0 litros de 150 y 180 CV). Las cajas de cambios pueden ser manuales de cinco o seis relaciones y algunos motores es posible asociarlos a un cambio automático de seis velocidades. Nosotros nos quedamos en esta ocasión con una unidad de pruebas dotada del propulsor diésel 1.6 BlueHDI de 120 CV en su variante ´normal´; la otra de idéntica mecánica tiene ajustes en el motor y periféricos para conseguir una media de sólo 3,1 l./100 km. Aun así, nuestro 308 de 120 CV se conforma con una media de 3,6 l./100 km, que no está nada mal, si bien, como es lógico, nos ha subido un poco en nuestras pruebas (todos lo hacen), pero se ha quedado rondando los cinco y pico litros, a destacar para el uso que le hemos dado con frecuentes excusiones por la ciudad.

El Peugeot 308 BlueHDi de 120 CV tiene un rodar suave y delicioso. Nos hemos acomodado mejor de lo que pensábamos en su puesto de mandos, en el que la instrumentación está en una posición más elevada (cuando la marca estrenó esta configuración en el 208, nos costó un poco acostumbrarnos), y nos llama la atención el pequeño diámetro del volante, que además no es del todo redondo, puesto que la parte inferior está achatada, como hemos visto en algún deportivo. También nos ha gustado que la consola central aparezca limpia gracias a que la pantalla táctil del sistema multimedia (tiene casi 10 pulgadas y va de serie a partir de las versiones intermedias) aglutina muchas funciones.

Volviendo a lo refinada y eficiente que es su mecánica, nos decantamos sin dudarlo, a tenor de sus prestaciones y también (todo hay que decirlo) de los límites de velocidad actuales, por este nivel de 120 CV. Quien desee ahorrar más, si le parece poco la media que homologa, puede ir a por la versión mencionada 1.6 MBC de 3,1 l./100 km, pero hay que tener en cuenta que su respuesta está un poco más atenuada

que nuestro modelo para conseguir esos bajos registros.

El vehículo que nos ocupa tiene brío suficiente, acorde con el carácter rutero del coche, y nos enseña reacciones buenas para su nivel de potencia gracias a su contenido peso (alrededor de 1.260 kg) y a unos desarrollos del cambio manual de seis relaciones bien escalonadas.

Ya sea de serie o en opción, el Peugeot 308 puede contar con proyectores de Led (alumbran bastante bien), cámara de visión trasera, internet para el sistema multimedia (da acceso a varias aplicaciones interesantes), freno de estacionamiento eléctrico, programador de velocidad adaptativo, freno de emergencia precolisión (primero avisa si el vehículo de delante aminora mucho la velocidad), aviso de objetos en los ángulos muertos y aparcamiento automático, entre otros elementos.

El Peugeot 308 BlueHDI de 120 CV tiene un precio de partida de 20.350 euros, 1.500 euros más si se prefiere con la caja automática de seis relaciones.